martes, 1 de agosto de 2017

SIN VALORES…


¡NO HAY EDUCACIÓN MORAL!

Imagen relacionadaA juicio de Jacques Maritain, una de las virtudes más destacadas es el culto a la verdad. Definida sencillamente, la verdad sería lo opuesto a la falsedad; sería la que nos brinda un informe cierto de la realidad, es decir, lo contrario de la mentira y del error.

Nos han enseñado ¿en casa?, en la catequesis…en la escuela…que la verdad es el fundamento de la vida humana, tanto de la vida personal como de la vida social. El hombre tiene, o debería tener como objetivo básico la tarea de gestionar su existencia conforme a la verdad, descubriendo y entendiendo su auténtico sentido.

De donde se concluye que el en cualquier cultura, sociedad o país, y en todo tiempo, el ser humano debería estar en la búsqueda de la verdad, de los valores y del bien común, la justicia y la solidaridad. Algunas virtudes que derivan del amor a la verdad:

a) La sinceridad, virtud ésta que necesitamos de modo especial. La sinceridad exige que nuestros actos estén en consonancia con lo que “decimos”. Nos exige quitar máscaras.

b) La veracidad, es la sinceridad de las palabras. La palabra es exigencia y compromete a las personas que la emiten. ¿Por qué comprometen?...Porque lleva un mensaje, transmiten algo personal a alguien.

Si nuestro lenguaje es positivo y sincero, somos portadores de armonía y vida. En cambio, si la manipulación rige las relaciones de un grupo laboral, familiar…no podemos hablar de comunicación. Es necesario decir la verdad, siempre. “Soy amigo de Platón, pero primero, soy amigo de la verdad” (Frase atribuida a Aristóteles).

c) La confesión de los pecados y errores. Es de necios persistir en el mal o en el error. La falla, la equivocación es común a todos los mortales. Nadie está exento, por el mero hecho de ser humano, finito y con tendencias al mal.

Pero, una vez descubierto el error, se tiene la obligación moral de corregirlo. No vale- en este caso - aquello de: “Nadie está obligado a declarar en su contra” Así las cosas, podríamos intentar poner en práctica - difícil, pero posible - , algunos propósitos:

Luchar por decir la verdad, por hacer el bien, por ser justos. Tomar conciencia de hacer el trabajo bien hecho. Obrar con sentido de cooperación. Trabajar la imaginación creativa y la capacidad intuitiva (intuición). Utilizar correctamente la inteligencia. Por ejemplo:

Que un arquitecto o ingeniero contratado utilice materiales resistentes y de buena calidad, en vez de usar materiales de segunda. Que un juez se niegue a ser sobornado para liberar al culpable de un delito.

Que un funcionario público no sea obligado por su jefe a “coimear”. Que un contador no colabore con sus clientes, en la evasión de impuestos. Que el árbitro de fútbol sancione a quienes infringen las reglas, sin favorecer a nadie, en particular.

En un hospital, que un médico se niegue a practicar un aborto, por lesionar los principios éticos de la institución. Que el policía no reciba soborno para evadir una ley. Que el patrón, pague el salario justo a sus empleados, etc, etc, etc.

Es decir, que la verdad, por fin, ocupe el lugar de la mentira y el engaño.

“El desafío ineludible - decía Montero Tirado- es actuar con una ética que contribuya a la construcción del bien. La conducta humana que merece calificarse como ética negativa, porque hace mal, mata el desarrollo y futuro de personas, comunidades e instituciones”.

Por eso se afirma que sin ética no hay futuro. Un análisis del subdesarrollo de nuestro país y sus causas lleva desgraciadamente a la conclusión de que la falta de ética de muchos ha sido y sigue siendo el factor más gravitante para mantener el subdesarrollo.

Las culturas construyen su código de ética. Es importante saber que todas coinciden en un principio mínimo: “No le hagas al otro lo que no quieres que te hagan a ti” o en positivo: “Haz al otro lo que quieres que te hagan a ti”.

Sin ética no hay futuro. “La ética es parte constituyente del ser humano. Es imposible eludir la responsabilidad personal y colectiva ante el bien y el mal. (Jesús Montero T. ABC 22.07.13).  




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