Sus trampas y mentiras
Evidentemente, lo que hace la Ideología
del Género, es dejar del lado totalmente el tema de la mujer, buscando el marco
de aceptación al homosexualismo y a todas sus variantes. Esto también se vio
fuertemente debatido en Pekín (1995) y continuamente entra en el debate de los
países cuando se quiere crear alguna ley nueva sobre el género.
Esta Ideología reemplaza el concepto de
identidad sexual que incluye la referencia a la biología por el de roles sexuales. Rol es una palabra que proviene del teatro. Un actor puede
protagonizar un rol que luego, puede
cambiar si no lo satisface o si le ofrecen una obra mejor. El rol es diferente
que la persona. Al aplicar el concepto
del rol sexual a la identidad sexual se da entender que esta es intercambiable a
voluntad.
“Tengo la identidad masculina, mañana
puedo tener femenina, travesti, etc.”. Todo puede cambiar y nada es fijo, nada
estable según este pensamiento de la Ideología del Género. Casi nunca se usa la
palabra homosexual como tal, sí, se los presenta primero, como opción
sexual, y segundo, como conducta sexual alternativa. Entonces se pretende
inducir a la población a pensar que todo vale, que todo es absolutamente
normal, absolutamente aceptable, absolutamente tolerable.
Así
la Ideología del Género elimina el concepto de naturaleza. Ya no sería
natural que un ser humano con cuerpo del varón sea solamente varón, tampoco
sería antinatural que un varón pretenda comportarse como una mujer y viceversa.
Se busca eliminar la diferencia entre
comportamientos normales. Se busca poner en pie de igualdad el error y la
verdad, lo antinatural y lo natural.
De esta manera el término opción
sexual es falso, pero sirve de propaganda para los grupos de
homosexuales. Puede tolerarse ciertas anomalías ya que forma parte de la
convivencia ser tolerantes, comprensivos. Pero que se nos quiera distorsionar
la verdad y presentar conductas sexuales aberrantes, como igual a lo natural,
es sencillamente inaceptable.
Además, la Ideología del Género quiere justificar comportamientos homosexuales
como si fueran de elección libre, y por tanto, no censurables. Pero esta
manera de ser, ni ayuda a los homosexuales ni favorece al resto de las
personas. Entonces, la palabra “género”, para identificar los comportamientos
sexuales deberíamos retirar porque induce a mucha confusión y al error.
Entre los comportamientos que la
Ideología del Género quiere imponer en la sociedad está la de buscar legalizar la unión de personas del mismo sexo.
Para ello deben atacar frontalmente el matrimonio, haciéndolo ver como una
institución cambiable en la que la complementariedad del sexo masculino y
femenino, no tiene ninguna importancia.
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