PROCESO
DE BEATIFICACIÓN O CANONIZACIÓN
(De interés católico)
Al
canonizar a ciertos fieles, es decir, al proclamar solemnemente que han
practicado heroicamente las virtudes y han vivido en la fidelidad a la gracia
de Dios, la Iglesia reconoce el poder del Espíritu de santidad, que está en
ella, y sostiene la esperanza de los fieles proponiendo a los santos como
modelos e intercesores (cfr. Concilio Vaticano II, LG.40; 48-51). Un proceso de Canonización sigue cuatro pasos: