Cuál es la diferencia?
Existe una expresión que dice: “no siempre se comprende lo que se conoce”, es decir, la teoría, la información o el conocimiento, pueden estar instalados en la bóveda mental; pero ¿comprendemos cabalmente eso que conocemos o creemos conocer?
Dice Jorge Dorta, escritor/economista: Hay gran diferencia entre entender y comprender. Se puede entender una frase pero no comprenderla. Por ejemplo, “lo obvio es invisible”.
Entender es notar el significado de algo, aunque no se comprenda. Comprender es hacer propio lo que se entiende y actuar en consecuencia. Comprender es tomar consciencia de algo. Integrarlo en uno mismo. Descubrirlo en su sentido profundo.
Alguien escribió: “Cuesta creer que se ignora el valor de ser fieles, solidarios, íntegros respetuosos. Estos valores, por sí, el humano conoce; ¡jaikuaa upéa!
¿Por qué hay injusticia? ¿Por qué hay gente explotada con salario de hambre? ¿Por qué se mata, miente, roba, se dicta sentencia comprando o vendiendo conciencia? ¿Por qué el “hombre” se vuelve lobo para el “otro” hombre? ...porque...¡No siempre se comprende lo que se conoce!
El saber científico no puede explicar el mandato “amarás a tu prójimo como a ti mismo”, porque los genes nada saben del “el amor al prójimo”. Dicen que los genes marcan la conducta humana. Si es así, ¿qué sentido tiene la voluntad libre?
Desear una ética basada en la genética, traerá terribles resultados. Así, de robos, crímenes y demás miserias, serían culpables nuestros genes…solo seríamos “máquinas pensantes”, incapaces de autodominio y por consiguiente, libres de todo pecado.
Luego, la libertad sería un estorbo para el cuerpo y el espíritu; por eso, “tirar” la libertad a la basura, sería lógico acto humano. ¿No es una característica del terrícola hoy?.
Hace falta comprender, además de conocer, que el hombre es más que una máquina, que es más que su área cognoscitiva, que es más que su vida vegetativa, que vive siempre en la esperanza, que tiene un porvenir, que es, en fin, un ser escatológico.
Para el gato o el perro, el futuro no existe. Nada espera de él. Sólo se mueve por un sistema programado. ¡Grande, es pues, la diferencia entre el ser vivo infrahumano y el hombre!
Muchas veces me ubico en el lugar del oyente y pienso en lo duro que es entender lo que alguien nos quiere decir. No pocas veces, explicar algo y hacerse entender, se convierte en un gran desafío. Entienden cabalmente lo que digo?
Uno puede ser experto en un tema, pero no ser capaz de comunicar. Dará a entender algo distinto de lo que quiere decir. Por eso, el emisor debe conocer dos puntos vitales: saber lo que dice y saber cómo decir…para hacerse entender.
Buena comunicación no es la que transmite mucho, sino, la que es eficaz, directa y clara.
José Ramón Ayllón dice: “Entender significa captar que las cosas son, y saber lo que son. Esta capacidad no la encontramos en nada fabricado por la mano del hombre: la máquina fotográfica no ve nada, y el periscopio no sabe que el agua moja”.
Conocer, es poseerla interiormente. Porque conozco el “Puente de la Amistad”, puedo re-conocerlas si la veo, y también puedo describirla sin tenerla delante: no me hace falta su presencia externa, pues ya he afirmado que las poseo interiormente.
¿Puede pensar un computador? El mismo responde: Sólo sabiendo lo que es pensar y lo que es un computador seremos capaces de saber si tal objeto puede realizar tal acción. (José Ramón Ayllón-En torno al hombre p. 82)
Cuando hablo con mi amigo, su perro también escucha mis palabras…pero sólo mi amigo entiende lo que digo. Luego, entender es hacerse entender. (En torno al Hombre p. 83)
No hay comentarios:
Publicar un comentario