Hace ya muchos años nos decía el Padre Inocencio Llamas: La Bienaventurada
Virgen María tuvo muchas experiencias con el divino Espíritu Santo. Destacamos
tres muy significativos: 1º) Su Inmaculada Concepción. 2º) La Encarnación y 3º)
Pentecostés (Se conmemora el descenso del Espíritu Santo, sobre los apóstoles,
50 días después de la Pascua) Veamos: