¡Recomponer la Conciencia Moral Rota!
Corromper, entre otras acepciones es, según el Diccionario de la RAE: “Echar a perder, depravar, dañar o pudrir algo”, “hacer que algo se deteriore”. “Oler mal”. Corrupción es la acción de corromper o corromperse. Unos ejemplos:
*Un chofer…alzó un pasajero sin tapaboca, violando las medias sanitarias impuestas por el Ministerio de Salud. El conductor tampoco portaba el barbijo. Reclamado por una pasajera, el nervioso chofer dijo: “Si no te gusta, bájate ahora”.
Por su parte, el pasajero sin tapaboca, contestó, “Estamos en Paraguay y aquí nadie respeta nada” (www.lanación.com.py-04.05.20)
*El 97% de motociclistas de Paraguay no usa casco…y quienes lo hacen no lo abrochan, según un estudio difundido hoy por el Ministerio de Salud Pública. (05.12.17)
*Peatones son arrojados
de las veredas
ocupadas por mercaderías o estacionamiento de rodados. Los transeúntes descienden
a la calzada con peligro de su integridad. ste caos establecido es cotidiana
realidad aquí y allá. ¿Ha la autoridá kuera?.. ¡Y no
pasa nada anguirú!
*¿Qué de las normas de sana convivencia como prohibición de fumar en lugares públicos, ruidos molestos -entre otras- solo están para ser sistemáticamente violadas?
*¿Qué de los políticos, empresarios “tiburones” y demás asaltantes -que antes de levantarlo-, siguen devastando, prometiedon bienestar y democracia, mientras cada día nos hunden en la desgracia?
“Somos una sociedad sin visiones, nos llamamos democracia, pero somos democracia fraudulenta, de muy baja calidad. Tenemos un problema de representación…
Esto puede conducirnos a la anarquía, no propongo medidas autoritarias, solo exijo que se cumpla la Constitución y las leyes”, enfatizó el sociólogo José Luis Simón.
Un país saturado de leyes… que no se cumplen… ese es nuestro país, expresa Mónica M. C. Cáceres La Serna, abogada y docente universitaria. (09.05.2011):
"Tantos años de “celebrar” y “aplaudir” el enriquecimiento ilícito de tantos quienes de la noche a la mañana se convirtieron en referentes del “éxito”, han menguado las bases éticas y morales de la ciudadanía...
A tal punto que el estudiar, el esforzarse, el ser alguien, el trabajar, es cosa de tontos, y “el que no afana es un gil”, como dice el tango. Pero esta “filosofía” paraguaya ha calado hondo especialmente en la niñez y adolescencia de nuestro país...
Y la pregunta obligada: ¿Qué es lo que está fallando? ¿La norma no sirve?
Tanto dinero ya ha corrido en préstamos externos como el mismo presupuesto para implementar mejoras en la educación, en el empleo, en la salud, fortalecimiento de la justicia, etc. y sin embargo la delincuencia juvenil, en vez de disminuir ha aumentado".
Luchemos por recuperar valores como solidaridad y honestidad. La honestidad es una cualidad que nos gustaría encontrar en las personas o mejor aún, que nos gustaría poseer.
Que las reflexiones de esta semana santa, nos conduzcan hacia esos propósitos. ¡AMÉN!
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