sábado, 25 de marzo de 2017

EL HOMO SAPIENS

¿EVOLUCIONA  O  INVOLUCIONA?

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El hombre posmoderno se jacta de que la evolución humana nos hace más inteligentes y con mejores capacidades de adaptación, pero según algunos expertos, estamos perdiendo importantes “capacidades cognitivas y nuestra estabilidad emocional deja mucho que desear”.

“El desarrollo de nuestras habilidades intelectuales y la optimización de miles de genes de la inteligencia probablemente tuvo lugar en grupos de personas dispersos antes de que nuestros ancestros emergieran de África”, asegura el autor del informe, el doctor Gerald Crabtree, director del Laboratorio de Genética de la Universidad de Stanford, publicada en un artículo que salió a la luz en la revista Trends in Genetics. Y sigue diciendo:

“Si un ciudadano cualquiera de la Atenas clásica (digamos 500 años a.C.) fuera transportado a nuestra época, sería de los más brillantes intelectuales del momento, con una amplia cultura sobre temas filosóficos y científicos (los griegos ya sabían que la Tierra es redonda e inventaron la democracia; aunque, a pesar de ello, practicaban la esclavitud), y con una gran estabilidad emocional con respecto a la de nuestros contemporáneos.

Todo ello acompañado de una conciencia lúcida sobre las cuestiones más importantes que nos atañen como seres humanos”.

El escritor español Fernando Sánchez Dragó, señaló que estamos volviendo al chimpancé. “El cerebro del ‘homo sapiens’ fue desarrollándose cada vez a mejor hasta que llegaron las nuevas tecnologías. Se está creando un nuevo analfabetismo que ya no consiste sólo en no saber leer y no saber escribir si no, en no saber hablar… eso es el regreso al ‘chimpancé” 

El lenguaje de los jóvenes – de aquí y de allá - es pobre y desagradable. No tienen vocabulario y a falta de ello, inventan palabras que “contribuyen a la evolución y modernización” de nuestra ya muy mal hablada lengua.

Lo que todos reconocen es que nos enfrentamos a una nueva realidad, fruto de una cultura audiovisual, donde los móviles e internet constituyen las principales vías de comunicación escrita entre los jóvenes. ¿Qué consecuencias tiene esto?

La limitación de espacio y el precio de los mensajes, así como la rapidez a la hora de escribir, han generado una serie de abreviaturas en el lenguaje, que acaban invadiendo también las aulas escolares, con el consiguiente descontento de los profesores. Ya hay quienes dicen que si fueran un poco estrictos con la aplicación de la ortografía, como hace unos años, hoy tendrían que suspender a toda la clase.

Existe una "sufijación parasitaria" en la que "se tiende a lo que suena mal" (calceto) y a fenómenos como la "ortografía hiper-caracterizada y subversiva" (Amérika, poka, krisis) (cfr. Ruth Mayayo-Periódico del Estudiante).

Juan Pablo II se preguntaba: ¿Tenemos una idea justa de la conciencia? ¿No vive el hombre contemporáneo bajo la amenaza de un eclipse de la conciencia, de una deformación de la conciencia, de un entorpecimiento o de una "anestesia" de la conciencia?.

Muchas señales indican que en nuestro tiempo existe este eclipse, que es tanto más inquietante, en cuanto esta conciencia, está definida en el Concilio como el "núcleo más secreto y el sagrario del hombre... Por esto la conciencia, de modo principal se encuentra en la base de la dignidad interior del hombre y, a la vez, de su relación con Dios" (…)

¿Por qué este fenómeno en nuestra época? Una mirada a determinados elementos de la cultura actual puede ayudamos a entender la progresiva atenuación del sentido del pecado, debido precisamente a la crisis de la conciencia y del sentido de Dios antes indicada.

Juan P. II habla de "un verdadero vuelco o de una caída de valores morales". Pero su diagnóstico es aún más grave, pues añade: "el problema no es sólo de ignorancia de la ética cristiana, sino más bien del sentido de los fundamentos y los criterios de la actitud moral".

He aquí por qué mi predecesor Pío XII, con una frase que ha llegado a ser casi proverbial, pudo aclarar en una ocasión que "el pecado del siglo es la pérdida del sentido del pecado".

La conducta bestiaria (miente, roba y mata) con que actúa el hombre actual, el homo sapiens… ¿evoluciona  o  involuciona?.






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