¡Modesto homenaje al CEAP por sus 15 años!
Por ello recurro
al escritor y guionista
inglés, Neil Richard Giman, destacado autor dedicado al
mundo del cómic, literatura fantástica y terror. Nadie mejor para
aconsejar a un escritor, que otro escritor con más experiencia. Aquí las
ocho reglas seguir:
1. Escribe. 2. Pon una palabra detrás de otra. Busca la palabra y escribe. 3. Acaba lo que estás escribiendo. Haz lo que tengas que hacer para acabarlo, pero acábalo.
4. Guárdalo un tiempo. Luego, léelo como si no lo hubieras visto nunca.
Muestra a amigos cuya opinión respetes y a los que les guste lo que has
escrito.
5. Recuerda: cuando alguien te dice que algo está mal o no funciona en tu escrito, casi siempre tiene razón. Cuando te dice lo que está mal y como arreglarlo, casi siempre se equivoca.
6. Recuerda que tarde o temprano, antes de que el escrito sea perfecto, tendrás que dejarlo; empieza a escribir el siguiente. La perfección es como perseguir el horizonte. Sigue avanzando.
7. Ríete de tus propios chistes. 8. La principal regla de la escritura es que si haces las cosas con confianza y la seguridad necesarias, puedes hacer prácticamente lo que quieras…Escribe honestamente…lo mejor que puedas. No creo que haya más reglas. Y si las hay, no son importantes.
¿En qué momento una persona que escribe pasa a ser escritor? No lo sé, dice Cristian Vázquez. ¿Cuánta gente escribe cosas? Muchísima. ¿Son escritores? Lo primero que acude a la mente para distinguirlos es:
Si alguien publica su primer libro, podríamos decir, es escritor. Patricio Pron, en su artículo “¿Cómo se transforma uno en escritor? dice: para publicar un libro es vital haber escrito, y quien escribe, ya mientras escribe, es un escritor. Aunque no lo haya publicado.
Pongamos un caso extremo: un autor X escribe 20 novelas, pero no consigue publicar ninguna. Por fin un editor lo descubre y publica todas sus obras. ¿Solo en ese momento el autor X es un escritor? ¿Acaso X escribió 20 libros sin serlo? Seguro que coincidiremos que la respuesta es: No.
Pensemos: nuestro autor X dedicó mucho tiempo y esfuerzo para escribir durante toda su vida, trabajó sus textos, corrigió, reescribió, descartó y volvió a corregir, hasta quedar algo satisfecho con su tarea… Pero por A o B motivo no lo publica.
Tras su muerte descubren su obra. ¿Murió un escritor? Si sus libros eran buenos, murió un escritor; si no, solo “un tipo que escribía”.
Si un escritor
deja de escribir, ¿deja de ser un escritor? Grandes
poetas y escritores como Rulfo, Rimbaud, Salinger y
tantos otros, la niegan rotundamente.
Así las cosas, escritor es aquel que escribe y disfruta escribiendo. Quizá le resulte muy difícil; que no sea buen escritor; que no guste lo que escribe… pero, es escritor, y más aún, si disfruta con ello.
Por eso, estimado lector: si querés escribir...escribí....Ya lo dijo el famoso escritor José Saramgo: “Yo no escribo para agradar, ni para desagradar. Escribo para inquietar”.
Expreso muy anticipadamente, mis más
sinceras congratulaciones a los miembros del Centro de Escritores del Alto Paraná (CEAP), por sus 15 años de vida, fundado un día 30.07.2006 en coincidencia con el día mundial de la amistad.
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