miércoles, 7 de octubre de 2020

¡CÓMO TE LLAMAS!

                                                    
Me llamo Ing. María Sinfó… Dr. Pysá Tronco… Lic. Caramayola Tapa…El nombre es valioso. Es la palabra más dulce de escuchar. Es nuestra seña de identidad”.

Llamar al otro por su nombre supone un efecto gratificante. Hace sentir valorado, es vínculo de confianza y vuelve a las personas más abiertas. Implica alta sensibilidad.

Muchos, ante la pregunta, ¿cómo se llama usted, de inmediato responde: ing, doctor, lic. fulano de tal. ¿Quién pio te dijo que el cartón  académico es parte del nombre? ¡Ah che memby...por qué pio así loo!

Mencionar el título es una distinción de orden académico del que uno se hace merecedor, al haber concluido la carrera universitaria. ¡Y está bien!.. Pero...pero...

"Se tienen anécdotas de personas que han ido a sacar una copia de su acta de nacimiento, y piden que se les adicione el título universitario. Parece que nacieron siendo doctores o licenciados. ¡Cuánta mediocridad!", dice Rolando Fernández. Y agrega:

 “Quienes exigen anteponer el título a sus nombres, lo hacen por mediocres o narcisos. Otros, lo hacen por “lambonismo” (lamebotas) por creerse meritorios. Subalternos y seguidores, tienen que adularlos, para satisfacer su enfermizo egocentrismo". 

A los encopetados exigentes, cuando les dicen, Ing, doctor o licenciado, se sienten importantes; se abren como los pavos reales; “expanden las alas a todo dar”; se auto consideran la gran cosa. 

Otro katú he-í: “Te digo nio profesor o doctor, “por respeto…lo que, obviamente, hace suponer que, al llamar al otro por su nombre, ¡no se le respeta!. No es falta de respeto llamar al ministro ni al Presidente ¡señor Marito!...¿O sí? 

No es necesario llamarme por un título ya que estudiamos para ser mejores, ayudar a la familia, al prójimo…el título se muestra en la práctica con humildad, sinceridad cariño...ese es mi título" 

Si no te gusta tu nombre, vas a la institución encargada de tramitar el cambio de nombre. Ser libre es poder decir y hacer lo quieras. La libertad es un elemento constitutivo de la dignidad humana.

Dios nos hizo libres para elegir el bien o el mal…el cautiverio y muerte... o vida eterna. A la libertad de actuar según nuestra voluntad, llaman libre albedrío

Luego, me permito decir: no es falta al respeto llamar a la persona por su nombre, así sea el gerente general del universo.  ¡Hasta siempre…¡calificados lectores...gracias manté!

domingo, 4 de octubre de 2020

GENTE TÓXICA: “KANGUERÓ”

                                    

Los psicólogos llaman personas tóxicas a aquellas de mentalidad negativa y conductas que perjudican a quienes los rodean. Son tramposas-pokarê. Provocan efectos negativos. Personas tóxicas" hay en nuestro círculo social, en el trabajo o en la propia familia y son:

-Egocéntricas. Sólo hablan de sí mismas, lo hacen en exceso y se olvidan de aquellos que los rodean. Son narcisistas y arrogantes.

Son indiferentes a las necesidades de los demás. Sus problemas siempre están por encima de todos, obligando a los demás a atender sus necesidades, aunque estas sean nimias o banales.

-Pesimistas y negativas: La base de su conversación es "plagueo" y ánimo derrotista. Solo critican  y ven el lado negro de las cosas, se centran en los problemas: no en soluciones.

-Se victimizan siempre: Así son centro de atención, evitan hacerse responsables de sus actos y hacen que los demás atiendan y satisfagan sus necesidades.

-Envidiosas y celosas: les disgustan lo bueno que te sucede, no dan importancia a tus logros o actúan con indiferencia ante ellos. Suelen desanimar a otros, encontrando siempre un error o un "pero" a tus ideas, planes, etc.

Otras actitudes que muestran su envidia es hacerse con méritos ajenos, criticando. Luego, es muy probable que cuando esté con otras personas, hable también mal de vos.

-Incapaces de alegrarse con los demás: se alegran del mal ajeno y sienten envidia cuando a los demás les va bien.

-Vanidosas: arrogantes y soberbias, se glorifican a sí mismas y alardean de sus dones intelectuales, físicos, etc… -Ignorantes: su ignorancia, les lleva creerse superior a todos.

-Infelices: aunque muestren lo contrario, en realidad no son felices, porque sus actitudes negativas, impide vivir en paz, concluye Marta Vicente. 

Cuando nos agreden, las vemos como "enemigas" y afloran sentimientos negativos hacia ellas, pero, es mejor ser compasivos. Nuestra actitud cristiana ha de ser compasiva...con ella... no con sus actos. 

Hay otro tipo de “Kangueró”, según la gentuza: es ese pequeño universo de gente, que orienta su lucidez hacia acciones honestas, rema contra-corriente, corrige fraternalmente a quien yerra, ayuda....

¡Es que, el bestiario no tolera la decencia!.. Más confiable es el amigo que corrige que el enemigo que besa (Prov. 27, 6) Y San Agustín advierte la grave falta de omitir ayuda al prójimo: “Peor eres tú callando que él faltando”.

Luego, ¿importa que goriloides de conciencia averiada te considere Tóxico o Kangueró”? .

sábado, 3 de octubre de 2020

¿QUE TIENE DE MALO?

                                        Mal hábito de “justificarse”

                                   
El “especialista” en negar o transferir responsabilidades, con descarada actitud de tahúr, que saca mañosamente el naipe de la manga, dirá: ¡Qué tiene de malo, no es para tanto!.., intentando justificar su llegada tardía a la cita o u otras conductas fallidas.

No es bueno que los pretextos hagan perder la confianza y credibilidad ante los demás. Hacer del pretexto un hábito para engañar, es lo mismo que usar muleta de cera en el asfalto caliente. La mala reputación solo se corrige con correcta actuación.

Lo único que nadie puede evitar es morir. Todo lo demás es posible en la vida, si se pone “empeño y garra”. Luego, la pregunta ¿qué tiene de malo?, podríamos sustituirla por… ¿Qué tiene de bueno lo que hago?

Los pretextos son como una segunda piel del terrícola. La mentira -japú- es parte de su naturaleza caída. Si queremos sacudirnos de la condición de gente chapí-pokaré, del: “No hice kurí porque…” “Me atraséngo…justo mi perrita parió”…el tiempo no ayudó, etc.

Un adagio reza: “Duplica la falta quien la justifica”. Toda excusa busca justificar errores cometidos. Todo hombre teme ser juzgado, criticado, acusado, por eso exhibe un rosario de pretextos para explicar lo que no tiene sobria explicación.

Errare humanum est significa: "Errar es humano". Errar es natural, hay que aceptarlos y aprender de ellos para no repetirlos. El dicho completo es: “errare humanum est, sed perseverare diabolicum”: "Errar es humano, pero perseverar en el error es diabólico".

Todos tenemos algo de malo, por ello no critiquemos a los demás…(Juan 8,7) 

La excusitis es un tipo de enfermedad que nos domina y se hace compañera de vida. Con la ayuda de Dios y nuestro esfuerzo personal venceremos este mal que nos invalida para asumir con valentía y honestidad las consecuencias de nuestros propios actos.

¿Cómo curarse de la excusitis, enfermedad del fracaso? Wilson Ardila Marchena dice: Las 4 principales excusas: Mala salud, falta de inteligencia, la edad y mala suerte. La mejor vacuna contra la excusitis de salud contiene estas 5 dosis.

1. Decide vivir hasta que muera. 2. Elimina conversaciones acerca de tu mala salud. 3. Evita estresarte por tu salud. 4. Agradece auténticamente por tu buena salud.  5. Disfruta de la vida a pesar de todo.

Muchas personas aunque presentan problemas de salud, logran una existencia plena y productiva. Se sienten bien consigo mismas y convierten sus dolencias en motores de su crecimiento personal.

Es necesario vivir con mesura, disfrutar de las cosas que son gratis: el abrazo de nuestros seres queridos, la sonrisa de los niños, de un bello amanecer o atardecer, escuchar el canto de las aves; tenemos grandes riquezas, hoy es un gran momento para vivir y ser feliz.

 Y decir como el cantor: "Este es un nuevo día, para empezar de nuevo…Para cantar, para reír, para volver a ser feliz. Para agradecerle al Cielo, La gentileza de un nuevo día"…

viernes, 2 de octubre de 2020

"SERVIDORES PÚBLICOS"... INCOHERENTES

                             
Cuentan que en el año 63 a.C. César fue elegido pontífice máximo de la religión romana, lo que le daba derecho a residir en la residencia oficial en la Via Sacra

Su esposa Pompeya celebró una fiesta: la “Buena Diosa”, a la que ningún hombre podía asistir. Pero, el joven patricio, Publio Clodio Pulcro, entró a la casa, disfrazado de mujer, teóricamente con el propósito de seducir a Pompeya. César se divorció diciendo:

Mi esposa debe estar por encima de toda sospecha”. La cita se hizo famosa: “La esposa del César no solo debe ser honesta, sino también, parecerlo”. Parafraseando a César diríamos: Todo Funcionario público debe ser honesto, no sólo parecerlo”.

Un desafío que el servidor público -desde el Presidente de la Nación para abajo-, debe enfrentar desde el primer día en el cargo, es el combate a la corrupción, principal causas de la miseria en la cual seguimos, dolorosamente chapoteando.

Corrupción es “abuso, robo, mentira, injusticia, muerte…” conducta desviada de quien ocupa un cargo –una carga pesada- en la estructura estatal. Experiencia ganada en este "rubro" nos acredita los primeros puestos -en corrupción- en el ranking continental.

El informe de Percepción de la Corrupción (IPC) de Transparencia Internacional, otra vez, posicionó al Paraguay como uno de los países más corruptos desde hace años. La política paraguaya sigue sufriendo una grave crisis de credibilidad y confianza por parte de la ciudadanía.

El divorcio entre vida y fe, provoca en muchos ambientes estatales, afán de poder y gloria. El cargo público se usa como tarima de impunidad, robos, tráfico de influencias y demás etcéteras ventiladas, una y otra vez, por la prensa. Y no se cansan de hablar de patriotismo y honestidad, pero….

Sin referencia moral, se cae en un deseo ilimitado de riqueza y de poder, que aplasta todo y cualquier “discurso” de promesas de vivir en un mejor país, que tanto cacarean.

Muchas autoridades -salvando excepciones- carecen de credibilidad. Se saben despreciados, y no pocas caminan dos pasos sin guardaespaldas…¿Qué vida es esa? ¿Por qué las autoridades, en vez de gozar de respeto y afecto de su pueblo, se esconden como...?

Un Paraguay honesto es posible. Falta que los de arriba actúen como César. Que el servidor público esté libre de sospechas, y sea ejemplo de decencia y austeridad… que tanto cacarea.¡Se puede ...si se quiere!

Ángela Villón Bustamante, representante de las trabajadoras sexuales, en su campaña por una banca en el Congreso Peruano, dijo Una puta decente que hará del Congreso un burdel respetable (09.04.16)

 ¿Cuál es la diferencia?... su gran mérito y valor de…al menos ser ¡¡¡COHERENTE!!! ... ¡Quien pueda entender...que lo entienda...!

martes, 29 de septiembre de 2020

¡ME HACE SENTIR BIEN!

                                         
El querido primo hermano Tony es quien no está ahí, solo para pasarla bien. Es de los que te “bancan” en momentos duros de la vida. Mi “dilatada pubertad” asegura que Tony no te dejará cuando las “papas queman”. A él debo el título: “Me hace sentir bien”.

El aprecio crece cuando nos reunimos recordando divertidos o complicados recuerdos de infancia. El afecto es especial porque somos familia, un vínculo para siempre. Por algo dice un adagio: “Un primo es alguien que entra cuando el resto del mundo sale”.

Un tema siempre abordado es: ¿Por qué ser gente buena y ética, por qué hacer el bien? Tony responderá: porque “me hace sentir bien…me siento bien”. En efecto, estudios demuestran que es satisfactorio realizar buenas acciones. ¡Dios es el bien supremo!.

El generoso es sensible a las necesidades de los demás. Aunque los macedonios tenían grandes pruebas de infortunios, compadecían a los necesitados. El generoso no es débil-tonto...“Sin temer a las privaciones…ayudaron a los hermanos” (2 Cor 8, 4-6) ¡Pablo no era vyro, era valiente, como pocos hombres!

Se trata de compartir. Muchos tienen en exceso, mientras que a otros -sin culpas- les falta todo. ¡La historia no registra un generoso haya quedado en ruina, por ser solidario!.

 Ni le sobró al que había recogido mucho, ni le faltó al que había recogido poco” (2ª Cor. 8:15). Ingratitud es olvido y desprecio a quienes nos ayudan y están con nosotros en el dolor. El ingrato ignora los favores recibidos. Así, rindo homenaje de gratitud a Tony.

También saludo a los demás primos hermanos descendientes de aquellos titanes de la solidaridad, pauta de trabajo honesto, los abuelos María J. Espínola y José G. Viedma.

Tony es uno de quienes hacen posible que estemos llegando a diez años del programa radial, “Sembrando Valores”, (Red de Comunicación "El Verbo" 101.3 FM - 1190 AM).

Iniciamos esta tarea motivados por la esperanza de que se puede hacer lo aparentemente imposible, estimulando a despertar nuestra apática conciencia ciudadana, intentando construir una mejor sociedad: en el sentido de “hacer el bien y evitar el mal.

Coherentes con la idea, no nos cruzarnos de brazos esperando el fortuito acontecer, sino, diciendo y haciendo, en los tres frentes donde se desarrolla la vida: a) En la conciencia personal, b) En la familia, c) Fuera de casa, en ámbitos académicos, culturales y laborales.

Iniciamos la tarea, convencidos que “a pesar de todo, hay en el hombre más cosas dignas de admiración que de desprecio; que da más fuerza sentirse amado que creerse fuerte; que solo se posee lo que se regala”…porque sabido es que:

 El hombre es manifiestamente mejorable.

 Gratitud a los oyentes por comportarnos, soportarnos y no deportarnos”, al decir del hermano en la fe Carlos Díaz H. Por consiguiente, lo mejor que posee Sembrando Valores” es su AUDIENCIA.

domingo, 27 de septiembre de 2020

¿PLACERES QUE MATAN? Cumpleañero asesinado...

                                     

Alguien dijo: hay placeres que Animalizan, Engordan, Estupidizan, Embarazan o Matan. A priori, es difícil estar de acuerdo con estos pensamientos. Pero, observando las conductas de nuestra salvaje y matonil sociedad, ya no parecen…tan desacertadas. Aristóteles distingue tipos de placeres:

(a) Los placeres naturales y necesarios son aquellos que están íntimamente ligados con la conservación de la vida del terrícola, por ejemplo: comer cuando se tiene hambre, beber cuando se tiene sed, reposar cuando se está cansado.

(b) Los placeres naturales pero no necesarios son: comer manjares costosos, beber licores finos y carísimos, vestir ropas ostentosas, etcétera. Y, (c) los placeres no naturales y no necesarios, los nacidos de la vanidad: deseos enfermizos de riqueza, poder, honores, etc.  

Un caso triste: “Cumpleañero fue asesinado por festejar con música a alto volumen

La madrugada de celebración de un cumpleaños acabó de la manera más trágica posible: con muerte y heridos al borde del lago Iguazú en el distrito de José D. Ocampos, departamento de Caaguazú.

El festejo... acabó con la reacción de, posiblemente, uno de los vecinos del lugar, que realizó varios disparos con una escopeta, y horas después produjo el deceso de un joven de 26 años y 3 heridos.

La peor parte se llevó el cumpleañero Víctor Barreto, de 26 años, quien recibió el impacto a la altura del tórax. Fue auxiliado de urgencia hasta la capital, donde se produjo su deceso en la tarde de ayer.

Los otros heridos son E.F.L.C., de 22 años... R. L. de 32 años, y un menor de 17 años quienes presentaron balines en la espalda. Estos tres se encuentran en centros asistenciales de la zona.

De acuerdo a datos, todo se generó a raíz del alto volumen de la música en la celebración. Los disparos habrían provenido desde corta distancia, según el informe policial. El hecho se registró en la madrugada del miércoles. (cf. Diario Extra 24.09.2020)

Hay que distinguir las cosas que no se deben hacer, aunque “todo el mundo lo haga”, Es el caso que nos ocupa. ¡Nadie tiene derecho a matar... como nadie tiene derecho a molestar!...El crimen se explica…¡No se justifica!

Aporandú mínte: ¿Por qué “pio” no farrean día y noche sin molestar a nadie? ¡Hacé lo que quieras en tu casa: “e ka-ú pepé.. pero, sin desafiar y morir tontamente, causando pena y dolor a seres queridos.

Te sugiero algo anguirú: “Yo también escucho música en casa y tomo tranquilamente mi “ceecita”, sin molestar a los vecinos. No doy loo motivo para que me reten y menos, para que me maten, porque les respeto. Ellos no tienen por qué sufrir mi imbécil actitud mbareté.

Nota: Hagamos todo lo que se nos canta…pero respetando al otro, para evitar que una fiesta termine en velorio ¿Sí Pa?, porque hay desubicados como el matón que: "no sabe qué hacer y qué evitar".

jueves, 24 de septiembre de 2020

¡LA GRACIA PERDIDA...por un "plato de lentejas"!

                                      
En el Antiguo Testamento, Gracia significa, una actitud generosa de bondad gratuita por parte de Dios. Esaú era el hijo mayor del patriarca Isaac y de Rebeca. Era, por tanto, hermano de Jacob, antepasado legendario de los israelitas.

La expresión “venderse por un plato de lentejas” indica que una persona ha malvendido alguna cosa importante o incluso, traicionado a alguien o sus principios a cambio de un bajo precio. De este pasaje bíblico surge la expresión “venderse por un plato de lentejas”.

Entonces dijo Esaú: He aquí yo me voy a morir; ¿para qué me servirá la primogenitura? Y vendió a Jacob su primogenitura. Jacob dio a Esaú pan y un plato de  lentejas; y él comió bebió, y se fue. Así menospreció Esaú su primogenitura. (Gen. 25:32-34)

Eso pudiera suceder en nuestra vida cristiana.  Si ignoramos acerca de las bendiciones la cambiaremos por cualquier cosa de este mundo:

No amen al mundo, ni las cosas del mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Todo lo que hay en el mundo, deseos de la carne…proviene del mundo. Pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre. (1ª Juan 2:15-17)

¿Cuántos hoy, por cualquier vyroreí, canjean su “cuenta corriente” en el banco celestial?

Es decir, nuestros valiosos y eternos derechos igual que Esaú, ¡por querer más, tener más, sobresalir y competir a como dé lugar en este “valle de lágrimas”!

Muchos solo viven el “aquí y ahora”, sin planificar su día siguiente. Dicen: Comamos y bebamos, porque mañana moriremos (1Cor. 15:32) Viven solamente para hacer el mal.

Rechacemos el plato de lentejas aromadas por las “4 pes” que nos hacen perder el Paraíso: Poder, placer, plata y prestigio, herramientas que mal entendidas y utilizadas, originan una quinta «,  la del Pecado causante del dolor y miseria humana. Veamos:

* EL dios” Poder"Vivimos en una cultura del descarte porque el “dios poder” manda.

El resultado está a la vista: Moralidad rotosa llena de ambición y de codicia, gobernados y gobierno en un país a la deriva. ¿Cuántos debemos arrepentirnos de este pecado?

* El “dios” PlacerHay que reconocer que el placer acogota. Negarlo sería tonto. ¿Quién se niega a pasarla bien? ¡Hay tantos placeres seductores: de los ojos, del paladar, de los genitales. ¿Es malo el placer? No. Es malo cuando somos esclavos del placer.

* El “dios” Plata-dinero: Se dijo: Ese "poderoso don dinero", cupido de la codicia, es diabólicamente seductor, y en sus trampas cayeron hombres de todos los tiempos. “De un corazón corrupto llega la traición como la de Judas que traiciona a Jesús”.

¿Cuántos ladrones mbareté-pokaré, adúlteros, contrabandistas, corruptos, violadores, compradores de conciencia y vendedores de sentencias, etc…pueblan nuestra enanizada sociedad?  Y ¿Cuántos políticos y no políticos, debemos arrepentirnos de estos pecados?

* El “dios” Prestigio: un prestigio social ganado por algún valioso aporte a la comunidad, es aceptado con complacencia y gratitud. Pero, la exaltación exagerada del propio “yo”, indica a gente insaciable de delirios de grandeza, ignorando al mundo que lo rodea.

¿Cuántos políticos y no políticos, debemos arrepentirnos de este pecado?

Recordemos, No es lícito, ni aún por razones gravísimas, hacer mal para conseguir el bien". Sólo lograremos descartar la cultura del “descarte” si descartamos a los dioses de las 4P´s.

miércoles, 23 de septiembre de 2020

LA VERDADERA PAZ

                                   
Dicen que: “Paz es la capacidad de vivir en calma, en sana convivencia social y adecuado manejo de conflictos y evitar peores situaciones. Para ello -debemos “querer” -no sólo decir-, vivir en paz y poner “manos a la obra”. ¡Todos lo sabemos!

Una historia enseña sobre la paz interior: “Había un rey que ofreció un gran premio al  artista que pudiera captar en una pintura la paz perfecta. Muchos intentaron; el rey admiró todas las pinturas que le presentaron, pero solo dos le gustaron y eligió entre ellas.

La primera era un lago muy tranquilo. Era un espejo perfecto donde se reflejaban plácidas montañas que lo rodeaban. Sobre éstas, un cielo muy azul con tenues nubes blancas. Quienes miraron la pintura pensaron que ésta reflejaba la paz perfecta.

La segunda pintura también tenía montañas. Pero éstas eran ásperas y despejadas. Sobre ellas había un cielo furioso del cual caía violento aguacero con rayos y truenos. Montaña abajo parecía retumbar un espumoso torrente de agua. Todo esto no se veía nada pacifico.

El Rey miró atentamente, vio tras la cascada un arbusto creciendo en una grieta de la roca. En la rama del arbusto había un nido. Allí, en medio del rugir de la violenta caída de agua, estaba sereno un pajarito en su nido. ¡Paz perfecta!  El Rey eligió la segunda. ¿Por qué?  

Porque, explicaba el Rey, “Paz no significa estar en un lugar sin ruidos, sin problemas, sin trabajo o sin dolor. Paz significa que, a pesar de estar en medio de todas estas cosas, tengamos calma dentro de nuestro corazón...Es el real significado de la paz”.

Es por ello, que mantener la paz es una obligación primaria para todos, pero en especial de los padres, porque es en el hogar donde se aprende a construir paz; donde los padres tenemos la gran tarea de enseñar a los hijos el modo de resolver problemas.

Es increíble que en una pequeña sociedad como la familia, se pierde la paz. Las noticias revelan elevado índice de violencia y muerte en el núcleo familiar. Luego, la paz es algo frágil por lo que hay que trabajar diariamente para conquistarla.

Paz no es ausencia de guerra, ni “aceptarlo todo”. ¿Qué sería, por ejemplo, si los papás “aceptan todo” al descarriado hijo para lograr paz en casa?: “Si mi hijo hace lo que quiere sin frenos ni barreras -como ocurre en muchos hogares-, no habrá paz, sino, crecimiento de delitos. 

La paz se vive: al tener un real sentido de justicia, reconociendo los propios derechos y los de los demás. Enseñando a los hijos a distinguir entre el bien y el mal, al formar en ellos conciencia recta. ¡No es fácil tarea! 

En casa, los niños deben conocer el bien y el mal; aprender el hábito del esfuerzo, que no tienen derecho a todo, que el mundo no gira alrededor de ellos para satisfacer caprichos y convertirse en "amorosos tiranos”, como ocurre en tantos hogares.

Respeto. Cuidar que los niños no se acostumbren a tomar las cosas de otros, por muy insignificante que sea el robo, y si estropea algo ajeno, debe reponerlo, enseñarles que las cosas ajenas se respetan.

Generosidad, es algo de por sí difícil en los niños, es en esta edad cuando tienden a ser más egoístas, por ello es importante que vean un buen ejemplo: cómo sus padres ayudan al necesitado o al que tiene algún problema, dentro de sus posibilidades.

Cortesía. Se dijo que la cortesía “es hija del respeto al prójimo y hermana de la caridad”. El que es cortés sabe que no es el centro del mundo, es quien piensa en los demás y en sus sentimientos. 

martes, 22 de septiembre de 2020

¡LA DIFÍCIL CONVIVENCIA HUMANA!

                                               
¿Por qué es tan difícil “convivir-vivir con”, y por qué el desacuerdo surge tan fácilmente? Respuesta: Atacar es parte de nuestra naturaleza. Pero, la convivencia se construye para aprender a convivir. Muchas amadas parejas, vivimos en “normales” discusiones.

Libros y conferencias -aquí y allá- nos enseñan que todos somos diferentes y, por tanto, tenemos intereses diferentes, y el conflicto surge ante la diferencia de intereses, así sea escuálidos intereses que no interesan o no debieran interesar, por constituir un vyro reí.

Otro katú he-í: “Todo interés en su origen, tiene una base egoísta. El egoísmo es una condición natural vinculada a la supervivencia del terrícola, por eso la vida privada, económica o política es una competencia de intereses”.

De lo dicho se puede deducir que, como regla, el desinterés no existe. Luego, la educación  es el único remedio que nos puede volver menos bestiarios y más humanos, para tener la capacidad de aplazar el interés personal en beneficio del interés general.

El hecho de que los seres humanos vivamos juntos es, principalmente, por conveniencia. Para sobrevivir, nos necesitamos, pero la forma de actuar en conjunto debe ser enseñada y aprendida.

 Podemos acumular carretillada de títulos y méritos académicos...pero si en la familia se ignoran valores como respeto, libertad, solidaridad…todo será inútil. La escuela, la catequesis o el cuartel instruyen (meten conocimiento en la cabeza), pero no educan, es decir, no mutan conductas.

 "La familia está llamada a ser templo, casa de oración: oración sencilla, llena de esfuerzo y ternura. Una oración que se hace vida, para que toda la vida se convierta en oración". Y esta praxis se lleva fuera de casa.

 Dice Juan Pablo II: “El futuro depende, en gran parte, de la familia (base de la sociedad) que lleva consigo el porvenir social; su gran papel es el de contribuir a un futuro de paz”.  “El matrimonio y la familia cristiana edifican la Iglesia”.

"Solamente la libertad que se somete a la Verdad conduce a la persona humana a su verdadero bien. El bien de la persona consiste en estar en la Verdad y en realizar la Verdad". “Veritatis Splendor".

En marzo de este año, cumplimos 42 años de casados, y cada día es un aprendizaje. Vivimos muchos momentos felices, pero no me atrevo aconsejar a nadie, porque sigo limando rudezas del hombre viejo, aunque ya no soy lo que era, no soy todavía lo que quiero.

Creo que un gran desafío -entre otros- es construir nuevas formas de convivencia desde la familia, para mejorar nuestra comunidad y la clase política. No dudo que -aunque muy pocos- tenemos una aceptable cordura individual, pero una baja sensatez colectiva.

Es decir, no logramos construir un modelo de vida donde seamos capaces de postergar nuestros intereses personales, a favor del bien común. Todavía cala hondo en nosotros el cheve che gustá, ndaipori o manadava che rehé y otras perlas propias de nuestra faraónica chatura cívica.

Desear pirá piré es importante, pero no es todo. Muchos adoradores de la “prostituta universal”, al decir de Shakespeare en referencia al dinero- ven impotentes cómo sus hijos se corrompen por consumo de alcohol, drogas, prostitución. O cómo se enloquecen matando o matándose.

La paz de Cristo es “hacer de dos uno solo” eliminar rencor y perdonarse. (Ef. 2,14)

miércoles, 16 de septiembre de 2020

¡LA BUENA VECINDAD!

                                        

 Mejor es un vecino que está cerca que un hermano que está lejos” (Prov 27;10) Un doctor de la Ley preguntó a Jesús: “¿Quién es mi prójimo?” Jesús no respondió a quién era su prójimo, sino cómo uno debe comportarse con el prójimo o próximo.

Es conocida la parábola que utilizó Jesús, la del buen samaritano (…) y el hombre dijo a Jesús: “El que actuó con misericordia con su prójimo”. Entonces Jesús le dijo: “Ve y haz tú lo mismo” (Lc 10-37).

Esta parábola podría motivar a preguntarnos: “¿Soy buen vecino? ¿Me dejo llevar por el delirio de grandeza para decidir quién es mi prójimo? ¿Hago un esfuerzo por ser un buen vecino, por comportarme respetuosamente como un buen prójimo con los demás?”.

 Si deseo realmente ser mejor vecino, he de iniciar con actitud mental, poniendo en marcha el valor de respeto al próximo. Mi primer propósito será tomar conciencia que, el hecho de estar en mi casa no me da derecho a atropellar y quebrantar la paz, sagrado bien común.

Es decir, aplicar La Regla de Oro: Así que en todo traten ustedes a los demás tal y como quieren que ellos los traten a ustedes(Mt 7:12) De esta Regla se han desprendido códigos éticos, leyes, e incluso la Declaratoria de los Derechos Humanos. 

Honestamente, ¿cuántos cumplimos esta regla? Nuestra ignorante sociedad hace todo lo contrario, violando derechos, sentimientos y valores de otros, quizá por considerarnos superiores y con derecho a pisotear derechos de terceros.

Entonces cabe preguntarnos: ¿qué clase de sociedad estamos construyendo, si ya no se  respeta al otro? ¿Cómo vivir en armonía rompiendo reglas de convivencia básicas? Si lo que sembramos es pelea con los otros, nuestro aporte es abuso, es decir, pokaré-mbareté. 

Si desarrollamos empatía con quienes nos rodean nos convertimos en mejores personas, creamos un clima más armónico y el día a día es más amable. 

Considerar al otro el reflejo de quiénes somos y qué tan valioso es nuestro propio sentido ético. Una sociedad decente, noble, fuerte constituye bienestar social, ya que el respeto y la solidaridad vuelven a ser estrellas en la construcción de nuestro entorno humano.

No olvidemos que somos más fuertes como colectivo que como partes. Dejar de lado el “que me importa, hago lo que quiero, che rógape aimé”, es característico del tavy-matonil.

En el artículo “Amar al vecino como a uno mismo”, -revista The Nation Since 1865- la escritora y periodista Lise Funderburg dijo algunas cosas simples que se pueden hacer para lograr buena vecindad: 

Deseo [...] pequeños favores que los vecinos se prestan mutuamente -recoger los periódicos, cuidar de los niños, traer algo de la tienda 

Deseo mantener esa relación de cercanía en un mundo cada vez más distanciado, donde el miedo y el delito debilitan a las comunidades”. Luego añadió: “Hay que empezar por alguna parte, que bien podría ser la puerta de al lado”.

La escritora Marni Jackson dijo: “En la vida, los vecinos, al igual que la familia, no se eligen. La relación con ellos requiere tacto, cortesía, tolerancia”. Los buenos vecinos son generosos

Un buen vecino es gran valor. El buen vecino se manifiesta en las adversidades. Hay multitud de relatos sobre actos desinteresados en esas circunstancias. ¡Seamos buenos vecinos!