domingo, 19 de septiembre de 2010

Polka, Trapo y Guaripola

¿Elementos de nuestra política gamonal?
En los últimos días se ha visto y oído todo tipo encanto, desencanto, frustraciones y arreglos en el acalorado ajetreo de los partidos políticos, sobre todo, dentro de los denominados tradicionales. 

Según Alberto Flores Galindo, gamonal es un peruanismo, que busca establecer un símil entre una planta parásita y los terratenientes [...] el término designaba la existencia del poder local: la privatización de la política, la fragmentación del dominio y su ejercicio a escala de un pueblo o de una provincia...(Wikipedia)

Naturalmente, el vapuleado término “unidad” es el caballito de batalla y llave maestra para abrir las compuertas de la hipocresía práctica. Luego de encarnizadas batallas verbales, en las cuales no se han escatimado gruesos e irreproducibles acusaciones y amenazas de dirimir en los estrados judiciales, los peores agravios, la prostituida frase “unidad” realiza el milagro de desblindar estómagos y soportar el fétido olor bucal, para fundirse y confundirse en viborezno abrazo, en “aras de la unidad del partido, para felicidad” de este enclenque y dasahuciado país.

Atrás quedaron, al menos de momento, las amenazas y los dientes apretados por odios mal disimulados. Hoy el interés es más fuerte que los agravios. Para sellar la huidiza unidad – de este y aquel partido – hace su glorioso aporte en los encuentros e confraternidad, el gran trío <Polka, Trapo y Guarapo>, quienes se encargarán de distraer a la chusma, mientras los gamonales políticos “cranean” sus patrioterismos propósitos.

Abrigo, sin embargo, la esperanza que en un tiempo no muy lejano, lleguemos a dividir a los hombres dirigentes de la opinión pública en dos clases: los que generan problemas en el mundo y los que promueven en él la civilización. Los especialistas en “desasosiego” y los que buscan la paz. Los que glorifican el color del trapo, la polka y el guarapo, por sobre la decencia y honestidad.

Todavía creemos que los “buenos hombres” no deben meterse en política. Craso error, los buenos deben insertarse en la alta política buscando el bien común, pues si no lo hacen, dejarán que lo malos, los traidores, los Pilatos modernos y demás próceres de la política partidaria rastrera, tomen el control de la sociedad. El mundo – decía Mounier – es un montón de mierda, donde los buenos han de meter la mano, sin ensuciarse el corazón”

Para ello es necesario educar a la opinión pública, pero de esto, nos ocuparemos próximamente.

jueves, 16 de septiembre de 2010

¡¡¡LIBERTAD!!!...



¿Comprendemos su real significado?
  
EL 8 de noviembre de 1793 Madame Roland, fue guillotinada y, antes de colocar su cabeza en el cepo, se inclinó ante la estatua de arcilla de la Libertad situada en la Plaza de la Revolución y pronunció: "¡Oh, Libertad!, ¡cuántos crímenes se cometen en tu nombre!"

Es que, en nombre y bajo amparo del noble término “libertad”, se siguen cometiendo con habitualidad incontestable, todo tipo de errores hasta el punto que tales actos son – precisamente por su habitualidad – una manera de “cloroformizar conciencias”.

En nombre de la libertad se atenta, una y otra vez, contra las reglas de tránsito en perjuicio de la integridad propia y ajena; contra la decencia y el buen gusto, pues cualquiera hace cualquier cosa indeseable y de mal gusto en cualquier lugar; se atropellan derechos de terceros; se cierran calles y puentes por cualquier motivo, es decir, se cometen todo tipo de tilinguerías y delitos. ¿Cuánta injusticia cometen nuestras autoridades – administrativas, ejecutivas, políticas, policiales, judiciales -  en nombre de la libertad?

Estimado lector, pregúntese también: ¿Cuántos individuos que se dicen “libres” son en realidad esclavos de las opresoras estructuras político-partidarias? ¿Cuántos somos rehenes del infame grillete “económico-social” que nos dictan sus diabólicas leyes de: cómo vestirnos, qué comer, qué beber, cómo hablar, qué comprar?

En mal uso de la libertad, patoteros e inadaptados destrozan plazas, lumínicas, arrojan botellas a las calles, molestan con polución sonora y demás descarríos que usted conoce, es decir, con bestialidad enfermiza se ensañan contra el bien común.

El libertinaje brutal de unos "monos" con pantalones (pidiendo perdón a los karajás) que pueblan nuestra fauna paranaense, no puede sostenerse en el sufrimiento de muchas personas decentes. Alguien ya lo dijo: “Nadie es verdaderamente libre, si es irresponsable” 

Aquí cabe una inquietante pregunta: ¿De qué tipo de familia proviene esta juventud vandálica? ¿Qué porcentaje de responsabilidad tienen los padres en la reprochable conducta juvenil?

Bueno es recordar que: “La verdadera libertad consiste en hacer lo que se debe y no, lo que se quiere” Libertad consiste en desatarse de todas las dependencias que impiden realizarse en plenitud y en asumir las obligaciones y derechos con responsabilidad.

Quizá sea oportuna la ocasión para que muchos padres practiquemos una auditoría interior de nuestros valores y entender que la educación de los hijos no consiste simplemente en mandarlos a la escuela, darles comida y cuidar de su salud física. Más importante es fortalecer su salud moral para obtener ejemplar conducta. El recto comportamiento de nuestros hijos en la sociedad, será alivio y orgullo para los padres; lo contrario, desgracia.

Hoy, muchos adultos somos culpables de contemplar una gran porción juvenil con trastornos de personalidad. Y mucho de ello se debe a una errónea concepción de lo que llamamos libertad. Ya decíamos que la libertad sin responsabilidad es libertinaje y caos.

Así las cosas, para salvaguardar nuestra hermosa y gallarda juventud, es necesario saber que la educación comienza en casa. La escuela – dijo un amigo- dotará sólo de 15% de conocimiento; el 40%, se hará “camino al andar” y, el 45% restante, se adquiere en casa. De modo que, señores padres, con libertad responsable, y al estilo paraguayoité, propongo: asumamos nuestra responsabilidad y no seamos solamente “chorros de espermatozoides” y “vientres de reproducción”.

Sin temer la impopularidad que estas afirmaciones puedan provocarme, levanto gritos de protesta y propuesta, pues me amparo en una conciencia recta, porque sueño con un país mejor, con compatriotas de mente cultivada, pero sobre todo, educados.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

EDUCAR ES: “CONSTRUIR” AL HOMBRE

¡La gran dificultad, hoy!
No pocas veces – dice Roger Texier en “Antropología y Filosofía de la Educación”, p. 138 -  la educación es decomisada por la idea de la enseñanza como aprendizaje de conocimientos, habilidades y capacidades de dominio de tecnologías, en función de la competencia que requiere una sociedad.

Nuestras escuelas forman al estudiante para competir con éxito en la sociedad de mercado. Pero educar no es solamente inculcar saberes, que pareciera - a juzgar por el acelerado descenso del nivel ético de la humanidad – es el fin último de los centros de enseñanza.

Educar es despertar el potencial innato del ser humano, moldear actitudes de entendimiento y comprensión para dotar al individuo de los correctos medios para dirigir su propio destino.

Pero, ¿qué escuela, colegio o universidad se ocupa de la formación “integral” del estudiante? ¿Existe una escuela que se ocupe de la educación de ese campo que llamamos “la mitad superior” del hombre: su <interioridad o recta conciencia>?

No pocos estudiantes afirman sin titubeos que el conocimiento es la herramienta para triunfar en la vida. ¡Y tienen razón!, pues es “uno” de los elementos de la educación. Pero, ¿es esto educación o adiestramiento para que en el competitivo mercado laboral, el individuo se convierta en “lobo” para otro lobo? Al estudiante ¿se le invita a ser “persona”, o a ser “máquina de hacer” algo que dé dinero, y pasarla bien?  Lo demás.... ¿importa algo?

Es curioso que esta sociedad del “conocimiento y de fanfarronada competencias académicas” que propaga y se jacta de su cacareado “bienestar”, provoque tanta desigualdad y malestar,  diría  E. Mounier. Cada año las universidades lanzan al mercado laboral “buenos técnicos”.... pero ¿qué porcentaje de ellos son dueños de conducta ética y recta conciencia?

Es imperiosamente necesaria una educación que <construya> al hombre, mediante una escuela que centre su atención en la vocación de la persona, para construir una sociedad sana. La persona no se realiza siendo subordinada al dinero, al aplauso fácil y a la adulación.

La propuesta es que pongamos en el centro de toda actividad humana a la persona y en este contexto la misión del hombre consiste en “salir de sí para donarse” a los demás, con fe y esperanza. En este sentido, al decir de Mounier: “Es necesario realizar una revolución personal, que nace en el instante de una toma de conciencia, al rebelarse uno contra sí mismo, sobre su propia participación y complacencia en el desorden establecido.

Así las cosas, es elogiable y necesario que la escuela infunda en el alma del estudiante: cultivar la mente, estudiando y fortalecer la voluntad, mediante la adquisición y práctica de valores, para disciplinar su conducta. Sólo así habrá valido la pena llamarnos buenos ciudadanos y honestos profesionales.

No existe otro modo de combatir esta perversidad sobrehumana que es la corrupción de las costumbres que avasalla y “encallece” a los hombres, a los pueblos y a las Instituciones. Y fundamentalmente, pulvericemos definitivamente la trágica como generalizada idea de que los paraguayos - somos nomás luego - “genéticamente corruptos e ignorantes”

sábado, 11 de septiembre de 2010

Condición previa de la Educación: EL AMOR A LA VERDAD

Reflexión
 El dominio propio de la enseñanza es el dominio de la verdad, tanto la verdad especulativa como la verdad práctica - esto es, la Ética. Por eso el profesor debe respetar en el alumno la dignidad de su mente, su capacidad de comprensión y su preparación para pensar por sí mismo.

Respecto a la verdad, la inteligencia no es sino un instrumento, muy en especial cuando se trata de la educación moral. El educador debe llevar a cabo esta tarea de forma esencial. El principal deber de las esferas educativas de la escuela, no es tanto dar forma a la voluntad y directamente desarrollar virtudes morales, sino iluminar y fortalecer la razón.

Educar en la verdad constituye la misión de los educadores, es decir, enseñar a buscar y distinguir lo verdadero y lo falso. Cuando lo que se busca es la verdad, entonces también, necesariamente se busca el bien. La verdad y el bien se potencian entre sí. Fomentar la verdad, es un principio básico de la educación. Búsqueda de la verdad y búsqueda del bien son una misma búsqueda.

Cierto día la Belleza y la Fealdad decidieron bañarse. Después de un rato, salió del agua la Fealdad, se vistió con la ropa de la Belleza y se marchó. Luego la Belleza, al no encontrar su ropa, se puso los vestidos de la Fealdad. Desde entonces, muchos seres humanos las confunden. Pero hay personas perspicaces que se fijan mejor, contemplan las obras y el rostro de una y otra, y las reconocen, sin dejarse engañar por los ropajes de cada una

Debido a la importancia del tema, y con el sano propósito de llegar a la mayor cantidad posible de  personas que no pudieron asistir a las conferencias dictadas por el Dr. Texier, en ocasión de su visita a CDE, a principios de agosto de este año, me permito, con la debida licencia del autor, ir publicando éste, y otros temas. Sin duda alguna, será de máximo provecho, fundamentalmente para los señores profesores y, para quien lo desee.

“Conócete a ti mismo”. Esta frase socrática, ha sido repetida por veinte y cinco siglos de historia. Conoce lo más íntimo de tu ser. Conoce tus carencias, tus disposiciones, tus facultades. Conoce, en fin, tu vocación vital. Conoce tu propia interioridad, hasta aflorar a la superficie y sométela a la luz de tu propio entendimiento. Se dice una y otra vez: conoce lo que piensas, lo que quieres y lo que realizas. Sólo así, no sólo sabrás lo que quieres, sino también, querrás lo que sabes. Es ésta, una verdad sobre el Hombre.

¡Que Dios nos dé hambre y sed de la Verdad!

viernes, 10 de septiembre de 2010

Letanía 2010 - Catarsis






Perdonen mis lectores, por este desahogo, pero ¡HARTO  ESTOY  DE!:

Los políticos que hablan de democracia, mientras cada día nos hunden en la desgracia.

La gente “puerca” que no distingue la diferencia entre vivir en una ciudad o un chiquero; que arroja su basura en la calle o en cualquier patio baldío. Ellos hacen una sociedad sucia. ¿No conoce usted este tipo de ejemplar?

Los <gorilas con pantalones> que con potente equipo de sonido – en casa o en vehículos - nos “rompen” los oídos, despreciando el respeto por los demás.

Los “bestias” que hablan por celular mientras conducen, cargando con toda su familia en una motocicleta.
Los que nunca llegan a hora; los que nunca cumplen con lo prometido; los que siempre tienen excusas para no cumplir con su responsabilidad.
Escuchar antiguas quejas que “no hay trabajo” culpando a todo y a todos, pero cuando a  estos quejumbrosos se le ofrece trabajo, no quieren trabajar.
Los permisivos e inútiles papás que consideran el templo como si fuera parque de diversión para sus hijos, quienes hacen todo tipo de “kilombo” durante el desarrollo de la celebración eucaristía.
Los agentes de tránsito que viven sólo para “coimear” y no para educar.

Los “parias” de ayer, nuevos ricos hoy, quienes actúan como si fueran los “gerentes generales del universo”

Aquellos “ángeles” en la Iglesia, pero déspotas y explotadores con sus empleados o subalternos.

Las instituciones públicas que no cumplen con sus obligaciones por cuestiones electorales y políticas y sus funcionarios que sólo quieren trabajar seis horas.

Los que “carajean” día y noche contra el “Imperio”, pero no renuncian vivir el “sueño americano”.
Los que “carajean” día y noche contra la “Iglesia” pero corren a atropellarla para bautizar a sus hijos o para exigir el responso de sus difuntos.
Los considerados “santones y vacas sagradas” de la educación, que nada tienen de educación.
Los “intelectualoides de pacotilla” que hablan de ética, pero son esclavos de la estética.
Aquellos que consideran “su partido político” lo primero y lo máximo en su hipo-escala de valores, por encima de la familia, decencia y otros valores.
Aquellos que hacen de la pelota su vida, para vivir una vida “despelotada”.
Los prepotentes que estacionan sus vehículos en la verdea, obligando al peatón a bajar a la calzada, arriesgando su integridad física.
Los “animales-dueños” que tienen a sus perros en la calle, en vez de tenerlos en casa y bien cuidados. ¿Quién es más animal?
Los fariseos posmodernos que interpretan a otros la Biblia y acto seguido se burlan del prójimo y dictan sentencia.
Los varones “moralinos” y de las “loras perfumadas” que se “escandalizan” gua-ú por nimiedades, mientras ignoran o participan de groseros comentarios.

Los idiotas seguidores de telenovelas basura, como de los esclavos del fútbol mercantil mediocre, que nada bueno enseñan y mucho estupidizan.

Programitas-excremento, radiales y televisivos sin altura, que desparraman lo que son: mediocridad y pornografía, con la excusa de “entretenimiento”

Todos los consumidores consumistas por el consumo que los consumen.

En fin, de todos los contagiados por el terrible virus de la maldita trilogía del “Mbarté-Pokaré; del Ñembotavy y del Vaí–vaí” tan arraigado y atesorado en nuestra subterránea cultura guaraní.

Así las cosas, estoy “harto de mí mismo por tanta hartez que me harta”. Y a usted, estimado lector, ¿Qué le harta?

Como no poseo la capacidad de solucionar los graves problemas que aquejan a esta enanizada,  violenta y corrompida sociedad, al menos, esta letanía (plagueos) me sirve como catarsis. ¿A usted no, estimado lector? Pero a pesar de este torrente de desencanto y frustración, ¡sigamos con esperanza, remando contra corriente…!

IMPORTANCIA DE LA LECTURA

Reflexión

No podría un ser pensante ignorar la gran importancia de leer, habida cuenta que influye notoriamente en el desarrollo y maduración del individuo. La lectura, además, es indispensable en el rendimiento escolar pues es un vehículo para el aprendizaje y desarrollo de la inteligencia. La correcta lectura produce, entre otros beneficios:

a)      Desarrolla y perfecciona el lenguaje. Aumenta el vocabulario y bagaje cultural.
b)      Posibilita la capacidad de pensar lo que lee y “dialoga” con el autor; concuerda o lo rechaza. El lector nunca es sujeto paciente porque lo entretiene o distrae.
c)      Desarrolla la capacidad del juicio, de análisis y del espíritu crítico.
d)     Por consiguiente, la lectura enseña (instruye) y educa (muta la conducta).
e)      Es herramienta de trabajo intelectual porque pone en acción las funciones del intelecto. Por eso tiene relación con el rendimiento escolar.

Corre tanta literatura sobre lo expuesto que resulta un ataque a la obviedad. Todo esto lo sabemos y sin embargo, cada vez más nos esclaviza la dictadura del pensamiento común y la espantosa mediocridad. ¿Cuál será, al menos, una de las causas?

Dice Xosé M. Dominguez Prieto, en su libro “Ética del docente”: es una mala escuela aquella que, cual Narciso, sólo se mira a sí misma. Es una escuela anarcisada. Estamos en tiempos en que hay mucho profesor, pero apenas maestros; mucha aula, pero poca enseñanza; mucha información, pero poca formación; mucha noticia, pero poco conocimiento; mucho cientificismo, poca sabiduría; mucho contenido, poca crítica, en fin, mucha metodología y poca educación. Egresados y docentes hablamos y leemos incorrectamente. ¿Puede rebatirse esta realidad?

Esta escuela es la que enseña competitividad pero no competencia. Así las cosas, se da mala práctica docente cuando se traiciona virtudes que se debieran encarnar: la honestidad - porque no siempre se busca lo mejor sino lo más conveniente. La tan cacareada reforma educativa ¿es lo mejor o lo más conveniente? ¿Por qué leemos mal y no siempre comprendemos lo que leemos? ¿No es una falla del sistema educativo?

En esta escuela anarcisada es donde abundan toda suerte de popes, “grandes santones y vacas sagradas de la educación”, que si bien nunca se destacan por su creatividad, altura intelectual o moral, lo hacen por el manejo de otros medios “muy eficaces como la rastrera política partidaria”.

Tenemos buenos maestros, pero también patéticos testarudos y obcecados, y mucho de lo que hacen pasar por sabiduría, no es sino pedantería academicista, ese tipo de ignorancia que distingue al universitario medio o medio universitario, pero especialista en permisividad destructiva en aula.

 “Quien no quiere dialogar es un fanático fundamentalista; quien no sabe dialogar es una bestia y quien no se atreve a dialogar es un esclavo” enfatiza Carlos Díaz - aunque funja de docente. La lectura es un hábito y el “profe” es un referente capital.

En el Paraguay de hoy, sostener un libro en la mano es una señal de inteligencia. Y leerlo, constituirá simplemente una proeza. Existen egresados universitarios que nunca han culminado la lectura de un libro, aunque usted no lo crea. Así las cosas, ¿hay verdadero estímulo para la lectura? Cultivar la mente es indispensable en esta escala de valores tan necesarios para mutar nuestra débil conciencia ciudadana.

jueves, 9 de septiembre de 2010

PERSONA O INDIVIDUO

Según "El Personalismo Comunitario"



Dice Xose´Manuel Domínguez Prieto:
En la relación con las demás personas y con el mundo que está dentro y fuera de nosotros, nos relacionamos con nosotros mismos. Salir al encuentro es constitutivamente necesario para encontrarnos a nosotros mismos, porque no existe un "Yo" sin un "Tú". Esta realidad se radicaliza en la Iglesia que es comunión (común-unión), implica igualdad, misión propia, libertad en unidad, pluralidad y generosidad para con los "otros".
Para hacer vida lo antemencionado, es necesario notar la diferencia existente entre Individuo y Persona, según la concepción del Personalismo Comunitario.
Denominamos Individuo a la "dispersión de la persona en la superficie de su vida y a la complacencia de perderse en ella" El individuo es dispersión, disolución de la persona en la materia, en la acción, pérdida en lo múltiple e impersonal. ¿Cómo es esto? Hombre anónimo, sin vocación, sin sentido, sin horizonte, sin familia, sin vínculos personales.

Hombre anónimo, sin vocación, sin sentido, sin horizonte, sin familia, sin vínculos personales. Se repliega sobre sí, narcisista. Su actitud básica es la de poseer, reivindicar y acaparar. En las cosas pone su seguridad. El individuo se pierde en sus roles, en los personajes que representa. Pero sobre todo, el Individuo, separado de todos y de todo, opta por la solución en la soledad.
Por ello rechaza todo compromiso con aquello que no suponga beneficio. Por tanto, su propio estilo de vida es antitético a la donación gratuita de sí mismo. Sólo es capaz de afirmarse a sí excluyendo al "otro" como persona. El individuo es entonces, el que se inmuniza frente al otro, el que rechaza todo compromiso con lo que no sea su estricto interés.
Persona, por el contrario es, señorío y elección, es generosidad, superación y desprendimiento. Frente a la dispersión del individuo, la persona es dominio de sí, unidad de vida y disponibilidad. El primer deber de la persona no es salvar su vida, sino comprometerla con los otros, donarla a otros.
La Persona, por lo tanto, está naturalmente abierta a la comunidad, que es su "lugar natural". Ser persona supone ser generadora de comunidad, ser foco de luz, pues la persona no <se encuentra sino dándose>, mediante un doble dinamismo de acogida y donación. En ello radica su riqueza, pues piensa así:<Solamente nos encontramos al "perdernos" en y con los otros; sólo poseemos lo que amamos. Sólo se posee lo que se da>Luego concluimos que "YO" más "TÚ" es igual a Nosotros. Se constituye una apertura hacia un "tercero" El nosotros no es solo dual Yo más Tú, sino tríplice.
(*) Goyo Cataldi Viedma es escritor y docente, miembro de la Centro de Escritores del Alto Paraná (CEAP). Recientemente publicó el libro "Antropología Social y Cultural".

Miércoles 05 Diciembre 2007 | 20:12Hs.

¡SALUDABLE HIPOCRESÍA, EL PAN NUESTRO DE CADA DÍA!

Paternidad de Lugo


Como a la mayoría, la noticia (Fernando Lugo y su hijo y ¿otros..?) impactó mi pobre como débil ser. El frío como la espesa tiniebla, envolvieron arrolladoramente mi escuálido y desnutrido espíritu cristiano, debido a comentarios despiadados, críticas y sentencias vertidas por muchos cristianos pecadores de mi país, a otro pecador.



Concuerdo con el Prof. Secundino Núñez al decir que la conducta moral ha sufrido ataque y por lo tanto, se encuentra herida por una culpa. La fe del creyente cristiano, empero, no está afectada.
El "caso" Lugo es gravísimo problema que golpea la moral del cristiano, tanto como supongo, habrá sido para los Apóstoles, la cobarde negación de Pedro a Jesús, su amigo y Maestro, ante un malicioso requerimiento de la portera del palacio de Anás y Kaifás.
¡Y sin embargo, el cobarde y traidor Pedro, fue elegido por el Maestro para gobernar su Iglesia! ¿Se equivocó Jesús al confiar su Iglesia a un traidor? ¿Cómo se entiende esto?
El pecado de Lugo es una falta de conciencia y tendrá que vérselas únicamente con Jesucristo. La responsabilidad para con su hijo y la madre de éste, así como su mala gestión gubernamental, si fuere el caso, es una cuestión que debe ser requerida y ventilada por la justicia terrena.
Todos, absolutamente todos, sufrimos los insultos y ataques de los deseos inmoderados de los bienes terrenos y de los placeres sensuales (concupiscencia carnal) y todos somos víctimas del calor y de la quemadura de su fuego por causa de nuestra naturaleza caída.
Y resulta triste y lamentable, para el pecador y para el cuerpo de la Iglesia, la carroña humana. Pero también, sabemos que somos redimibles y rescatables si reconocemos penitentes y humildes nuestras culpas, habida cuenta que el Señor Jesús, por su Misericordia infinita, ha lavado nuestras fallas con su inocente sangre.
"Una sola gota de su preciosísima sangre tiene poder para lavar todos los crímenes del mundo" S. Tomás de Aquino.
Así las cosas, cabe preguntar: El adulterio cometido por los cristianos "impolutos" que rompe una y más familias, ¿no es peor que el pecado de la paternidad de Lugo? El asesinato practicado con la hipócrita versión de "aborto terapéutico", ¿no es horrendo crimen, peor que la paternidad de Lugo?
El secuestro, robos, asesinatos... ¿no son terriblemente más graves que la paternidad de Lugo? ¿Dónde están los inmaculados y honestísimos ante estos hechos? Pero estos mismos fariseos y Pilatos posmodernos, han abierto sus fauces como hipopótamos, para condenar la conducta moral de Lugo, en rigor, de menor culpa, que los crímenes citados precedentemente. El pecado de cualquier miembro del cuerpo de Cristo afecta la moral de la Iglesia.
¿Por qué, los cristianos, antes de condenar no meditamos en las palabras de Cristo quien dijo que de la misma manera que juzgamos y condenamos, seremos juzgados y condenados? ¿Por qué en vez de salir a buscar al pecador con garrotes y dientes apretados por el odio mal contenido, no hacemos como Jesús, quien ha dejado a las 99 en el redil y salió con amor en busca de la oveja perdida, y cuando la encontró, la levantó sobre sus hombros y la regresó junto a las demás?
Señor, ayúdame a doblar rodillas para pedirte por el hermano que cae en desgracia y que causa dolor, desencanto, escándalo y frustración, así como te pido perdón por mis muchas y grandes culpas, conocidas o celosamente guardadas. Satán, en hebreo significa acusador; no seamos acusadores, o sea, satánicos
Y, a pesar del escándalo, la Iglesia Católica sigue siendo la más creíble entre las instituciones de nuestro país, porque la conducta inmoral de uno de sus miembros, no tiene la última palabra.
¡Señor, redímenos de esta saludable Hipocresía, pan nuestro de cada día! Amén.
Jueves|30|ABRIL|2009

!HAGO LO QUE QUIERO...Y LOS DEMÁS... QUE "REVIENTEN"!

La ley del mbarete

Es la insultante y prepotente expresión que pareciera gritar jóvenes y no tan jóvenes, quienes en pandillas y al mando de sus ruidosas-molestosas motocicletas, - cuando no con automóviles - realizan imprudentes como peligrosas piruetas, tomando por asalto las avenidas de la ciudad, poniendo en riesgo sus vidas y la de transeúntes que nada tienen que ver con el desatino de estos inadaptados, especialmente los días domingos, en horas de la tarde.
Es intolerable la prepotencia con que la "chusma", en nombre de la libertad ataca despiadadamente el derecho de los demás. ¿Dónde están las autoridades, quienes, frente a cualquier micrófono o cámara, hablan de libertad y democracia, mientras, por omisión o inoperancia nos hunden cada vez más en la desgracia, al no aplicar la ley a infractores? ¿Cómo es posible que estos transgresores hagan lo que quieran sin ser mínimamente importunados?
Este ejemplo puede ilustrar: "Un motociclista, acompañado de otros, bebe cerveza en la calle. Alguien le señala la inconveniencia de alcoholizarse, habida cuenta que debe regresar a su casa. El aludido responde: "¡Yo hago con mi plata y con mi vida lo que quiero!" y enojado, sube a la moto y sale disparado. Pocas cuadras después, atropella una columna del alumbrado público, derribándola, lo que provoca accidente a terceros.
Al lugar del percance acuden efectivos de la Policía Nacional, unidad del Cuerpo de Bomberos, de la Fiscalía. Luego el herido - cuando no fallecido - es trasladado al hospital demandando atención de médicos y enfermeras. O irán a parar en alguna comisaría, hasta que algún manguruyú, despliegue "sus buenos oficios" a favor del energúmeno. ¿Cuánto cuesta al Estado, esto es, a nosotros, la irresponsabilidad de este "orangután con pantalones" ¿Por qué todos debemos pagar las consecuencias de la irresponsable actuar de un imbécil?
Hace falta que las autoridades cumplan su rol, pues nadie los ha obligado a ocupar los cargos que ostentan; han pedido votos y han prometido servir a la ciudadanía, y se lo hemos dado. Es necesario, por consiguiente, que no se desentiendan de sus obligaciones y apliquen ejemplares multas a los irresponsables, potenciales asesinos de gente inocente.
Una sugerencia a los señores Intendentes de aquí y de allá, quienes siempre están necesitados de recaudar: "Pongan los domingos por la tarde, agentes de tránsito en los puntos críticos donde concurren estos vándalos a quebrantar la paz pública, y al fin de cada jornada, se alzarán con una millonaria suma de dinero para las arcas municipales".
La misma filosofía podrá aplicarse a los que actúan, creyéndose "gerentes generales del universo", torturan a todos - hasta el amanecer - con ruidos molestos por polución sonora provocada por potentes equipos de sonido en rodados, como en casa. Para esta fauna importa un pito el sagrado derecho a descansar, de quienes trabajamos, así como el derecho que le es debido a la persona enferma o quien simplemente desea descansar en su hogar. El antídoto más seguro contra la chusma y sus pasiones desenfrenadas consiste en asegurar el cumplimiento de las disposiciones legales.
Si las autoridades cumplen mínimamente con sus promesas, la población agradecerá que se los libere de excesiva carroña como es el mbareté y el pokaré, elementos que tan profundamente los paraguayos hemos internalizado.
Me niego a aceptar que unos pocos bárbaros alcoholizados se erijan en dueños y señores de la vida de la gran mayoría de gente laboriosa y decente que habita nuestro país.
Me niego a que los badulaques prepotentes e ignorantes de esta sociedad enanizada y maximísera, nos sometan como rehenes de sus bárbaros instintos infrahumanos.
Me niego a permanecer callado ante tanta bestialidad, sólo por no caer antipático. En fin, me niego a aceptar como "algo normal" lo que está mal.
Pienso que la gente decente debe levantar su voz de protesta ante estos hechos, denunciar los actos punibles y ayudar al que desea redimirse. Es hora que ayunemos de la filosofía del "no te metas, para no complicarte la vida", el hacerse "del ñembotay" y del escandaloso puritanismo barato que alimenta estúpidamente el: "!así nomás luegos ko somos nosotros, mbaéiko ja japota!"
Una de las mayores tragedias que azota nuestro suelo guaraní, además del "dengue" y de otras lindezas, es la saludable existencia de ignorantes en demasía. Y ya sabemos que no hay peor plaga que "un burro con plata" en la sociedad. Usted me entiende ¿no?
Pulvericemos la "amable hipocresía social" que nos aprisiona, y enarbolemos la bandera del civismo y del bien común. Seamos ciudadanos y no "chusma", es decir, no nos contentemos con una simple democracia numérica-cuantitativa, sino, aspiremos además, a una democracia "cualitativa". Es compromiso cristiano de una Pascua permanente.
MIÉRCOLES|20|Mayo|2009

¡EL DÍA DEL PADRE...!

¿Vale la pena festejar...?

En el cuarto mandamiento de la Tabla de la Ley leemos "Honra a tu madre y a tu padre" ¿Puede existir una exhortación tan encumbrada como ésta? Me temo, sin embargo, que tal mandato bíblico hace tiempo ha sido repudiado por el homo sapiens, al menos, por una gran mayoría.
Se aproxima el día festivo. Los medios masivos de comunicación aceleran ofertas para regalar a papá en su día, avisos publicitarios asaltan los hogares y la maquinaria consumista empieza a dar sus agresivos pasos devoradores hacia la compra compulsiva. (Como intención, excelente y lo celebro). No obstante, me inquieta la pregunta: ¿Qué tan buenos padres somos? Los jóvenes de hoy, incluido niños - salvando las consabidas excepciones - no tienen noción del significado de "respeto", se ufanan en la grosera prepotencia aquí y allá, sin distinguir víctimas, así sean ellas sus propios padres; el lenguaje chabacano, el insulto y la violencia parecen ser la brújula que los orienta.
Sienten repugnancia hacia la familia, el colegio, el templo, la decencia y el buen gusto. Destruyen todo, autodestruyéndose. Visten y hablan "excelentemente mal" siguiendo los dictados de su majestad "la moda". El último grito de este desatino es la onda "emo", ndajé. Y no pocos adultos celebran esta superlativa idiotez. ¡Ah, cómo añoro la época de mi juventud! Naturalmente, antes había también bestias con pantalones, mal paridos y asesinos, pero irrebatiblemente, los padres eran obedecidos, ya sea por la dictadura familiar o por una correcta práctica del rol de papá. ¿Dónde hemos arrojado el mandamiento bíblico? ¿Por qué los padres hemos perdido la condición de "señor papá"?
Reflexionemos: ¿Qué respeto podemos esperar de los hijos a quienes les damos libertad sin límites, ropas estúpidamente caras, descontrol de horarios, coche y dinero en exceso? ¿Y cuánto de este lírico "bien vivir" no es fruto del delito, rapiña, coimas y demás etcéteras, es decir, del pokaré de papá avivado y letradito? Y para colmo de males, en nuestro portafolio lingüístico-familiar viven saludables y cómodos términos como "hijo de puta, perra, boludo, maricón de mierda" y otras lindezas de todos los tamaños y colores. Se ha escuchado a una chiquita de tan solo seis años, responder a su mamá: ¡Pará ya boluda...!
Este caos establecido en nuestra sociedad, sin embargo, no tiene la última palabra. Es urgente que los padres dejemos de ser sólo "chorro de espermatozoides" y nada más. Es hora de que nuestros hijos tengan Papá y no compinche. No deleguemos nuestra responsabilidad a la escuela o a la catequesis.
Cuando papá y mamá estamos siempre "muy ocupados", comienza la complicidad entre los padres y la futura delincuencia de los hijos. Las estadísticas gritan: si cada vez que un niño vuelve a casa y la encuentra vacía porque papá y mamá se encuentran trabajando para ganar más dinero (¿cuánto dinero?), sepamos que hemos comenzado a poner la primera carga para dinamitar nuestro hogar. No pretendamos sustituir el calor de nuestra presencia por la abundancia de ausencias envueltas en papel de regalos, pues los hijos necesitan "ser" más que "tener". Ayunemos, pues, de esta mala praxis.
En homenaje al día del Padre, propongo redimirme de algunos vicios, sobre todo del de doblar las rodillas y rendir culto al becerro de oro del dinero y del ñembotavy. Pretendo superar el pecado de ser solamente un "consumidor consumido por el consumo que me consume", regresar la mirada responsable hacia mis hijos para restaurar rumbos y no sumar a nuestro país más juventud errante, humanoide y maximísera. No hagamos de nuestros hijos monstruitos sociales que se volverán victimarios de propios y extraños. Esta juventud enferma es producto y consecuencia de ausencia paternal cuando no cobarde permisividad. ¡Basta..! Que los hijos tengan Papá, y éste no sea cómplice o rehén de aquel.
Por consiguiente, al elevar mi copa - pero sin ahogarme en ella - anticipo mis deseos de faraónica bendición y felicidad para todos los padres. ¡Salud!
LUNES|08|JUNIO|2009

DEBER vs PLACER

¡Qué aká rasy chamigo mí!


Estamos obligados a elegir, pero no a acertar, afirma José R. Ayllón, en su libro "Desfile de Modelos". Por eso es que necesitamos una brújula que nos guíe en el agitado y confuso mar de la vida. Porque la "vida buena" es muy fácil vivirla, no así, la "Buena Vida".
Luego, al hombre no le queda más remedio que diseñar un mundo habitable, algo que requiere elegir bien, para no acabar mal; respetar la realidad, respetarse a sí mismo; abrir los ojos y aprender a mirar; a superar la ley de la selva que vivimos en esta jungla de piedra; ya no ser "lobo" para el "otro"; practicar la sana convivencia; saber que el terreno está minado; estar dispuesto a sufrir las impertinencias de tantos gorilas con pantalones que habitan nuestra fauna, y demás etcéteras.
Tom Cruise dijo a aquel periodista (p. 24): "Vivo mejor con la conciencia tranquila que con una buena cuenta corriente". Pero, la conciencia tranquila, es legítimamente tranquila, sólo cuando aquella es limpia.
Se dice que Placer es estado afectivo agradable, unido a la satisfacción de un deseo o de una tendencia, al ejercicio armonioso de una actividad. Y Deber, lo que RAZÓN me dicta hacer. Y creo que éste tema es el problema.
Esta guerra interior de la razón contra las pasiones- dice aquel sabio- ha hecho que los que han querido vivir en paz hayan formado dos escuelas. Unos han querido renunciar a las pasiones y ser como "dioses"; otros han preferido renunciar a la razón y vivir como "bestias". Pero ni unos ni otros lo han conseguido. Y con frecuencia se han golpeado la cabeza contra el muro. ¿Cuántas bestias desfilan" en nuestra galería social hoy?
Actividad de pre-visión, visión previa que los romanos llamaron pro-videncia, deriva la palabra Prudencia: ver previamente, adelantarse a los acontecimientos, medir las consecuencias antes de obrar, verlas venir. Pero la Prudencia hay que conquistarla para vivir en sociedad (p33). .
"Al cuerpo sano no le conviene amputar la pierna, en cambio, amputar puede salvar la vida a un herido"...pero para qué esperar estar herido? ¿Por qué no pre-ver? Los jóvenes pueden ser muy inteligentes, pero no siempre prudentes, porque la prudencia es el dominio de lo particular, interior, al que sólo se llega por la experiencia. Y el joven no tiene experiencia, porque ésta se adquiere con la edad.
Por ello, no - pocos- adoptan conductas total y drásticamente contradictorias que atentan contra el deber, el sentido común, el respeto hacia las personas. (p.26)
¿Dónde está la "prudencia" de las autoridades, de los dueños de las estaciones de servicio que cobija a estos potenciales vándalos y también, dónde están los padres? Da la impresión que importa más a unos,vender alcohol, aun viendo que muchos de los que "aúllan" en la manada son menores. Y  otros, simplemente se hacen los ñembotavy.
Es hora que los mayores ayunemos de este grave pecado de omisión, y no esperar una sana juventud en el futuro si nadie hace algo por contrarrestar éste y otros males, producto de nuestra lacerante conducta posmoderna. Es prioritario para toda conciencia recta luchar por una juventud saludable, que ya es el presente.
Por tanto, necesario, conveniente y urgente es, que los padres, los profesores, las autoridades y todo hombre de bien, tomemos conciencia de esta grave responsabilidad, para que las buenas intenciones proclamadas en discursos aquí y allá, no sean sólo bellas palabras vacías de contenido.
La vida no es sólo placer, también es deber. Todos tenemos derechos y obligaciones. Vivamos,.entonces,, lo uno y lo otro. Con otras palabras, no dejemos que el "homo sentimentalis" aplaste al "homo sapiens". No dejemos que lo  irracional, mate a lo racional.