¿PRESA
DE HIPOCRESÍA JURÍDICA?
En su artículo “Los abogados y la hipocresía jurídica”, publicado el 21.07.2013, el Prof. Dr. Michael Reed-Hurtado, abogado y periodista, Juris Doctor con honores académicos, dice: “Hay más abogados en nuestro país de los que se necesitan, pero eso no para la maquinita de hacer abogados…
Existe
un asomo de desconfianza hacia ellos, pero al fin del cuento, ese atisbo
desaparece y todo se convierte en extraña admiración y dependencia…
Los abogados se tomaron lo público y lo privado. Con un par de palabras rimbombantes (o en desuso) se aprovechan del misticismo que gira en torno al derecho como cura. Además, con la citación de una norma, insignemente con la críptica referencia numérica a una ley o un decreto seguida por una ráfaga de artículos, cualquier discusión queda zanjada...
En un provocador discurso, el sociólogo francés Pierre Bourdieu argumentó que los juristas son los guardianes de una "piadosa hipocresía" que cobija tanto a los abogados como a la sociedad que los alberga”.
Esta gigantesca cloaca recientemente
ventilada por los audios (comprando y vendiendo sentencias, amenazas,
regalos…) y demás etcéteras que inundó
literalmente el país y el globo entero, está provocando un sentimiento de
hartazgo, dolor de cabeza y asco.
Ilustrados e ignorantes hablan aquí y
allá, de mañana, tarde noche y madrugada de esta gran “macchina di merda” como
dice el tano, que se cocina en fiscalías, JEM, entre otras instituciones perlas
de nuestra enferma patria.
“El abogado y ex ministro del Interior Carmelo
Caballero, quien también está salpicado por los audios del JEM, no quiso hablar
sobre su participación en hechos de corrupción develados en las escuchas,
escudándose en que los mismos son ilegales por carecer de orden judicial.
Preguntas: El hecho de que alguien filme
un crimen sin orden judicial, ¿deja de ser crimen por ello? ¿Qué es más
importante…descubrir un delito (cuestión de fondo) o la autorización judicial
(cuestión de forma)?
Si violo y mato a una criatura, y el
crimen fue grabado “ilegalmente”…¿deja de ser delito el horrendo crimen? Si
pesa más cuestiones de forma que el hecho real, contundente y criminal…de qué
justicia se habla?
Con razón se admite en círculos afines
que no existe justicia donde no hay personas justas. Y “sotto voce”, muchos
profesionales del derecho reconocen que esa infección apestosa se inicia desde
los niveles superiores.
Análisis de connotados juristas ven la
crisis por la que atraviesa la justicia, como una aberración que atenta contra la Carta Magna y, en consecuencia, nuestros derechos constitucionales. La
Constitución debe prevalecer: Hasta hoy es mera declaración platónica
sistemáticamente violada impunemente.
La crisis en el sistema de justicia. (La Nación 17.12.17. Por Ab. Oscar Germán Latorre). La vivencia diaria en tribunales nos permite
enfrentar todo tipo de injusticias, de situaciones absurdas, de fiscales
extorsionadores y de jueces que parecen mercaderes.
También
sabemos que existen mafias de abogados que controlan los procesos y que, en
muchos casos, logran congelarlos eternamente en algún cajón de un ministro de
la Corte. Pero lo que estamos escuchando realmente supera nuestra imaginación
más generosa y nos muestra un sistema judicial que no puede sobrevivir un
segundo más.
Ahora
bien, la crisis del sistema de justicia no se limita a la gestión que podría
corresponder a uno o más integrantes del Jurado de Enjuiciamiento de
Magistrados, porque la cruda verdad es que el 95% o más de los diputados y
senadores sistemáticamente tienen injerencia en la designación de magistrados,
fiscales, funcionarios y en los requerimientos del Ministerio Público o en las
decisiones judiciales.
Es
triste decirlo pero todos se bañan en la misma roña, todos tienen el mismo
pecado y todos, de algún modo, han sido vistos en los pasillos del Tribunal con
sus carpetas de pedidos entre sus brazos.
¿Qué más agregar a lo dicho por un ex Fiscal
General del Estado?
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