lunes, 1 de marzo de 2021

DIOS ES EL ÚNICO... ¡Ser Necesario!

La Cuaresma dura 40 días. Es tiempo de prepararse para recibir la Pascua, que comienza el miércoles de Ceniza y termina el Jueves Santo. El color litúrgico de este tiempo es el morado que significa penitencia.  

Para los católicos, Cuaresma es un tiempo peculiar de perdón, reflexión y reconciliación, con uno mismo y con los demás. 

En estos tiempos “progre”, a juzgar por la conducta intransigente, peyorativa, e insolente, pareciera que muchos padecen “síndrome de diocesillo”…“yo, solo yo y nadie más que yo…único y autosuficiente”. El otro no existe, y si existe, no es visible, o es descartable. 

Así las cosas, intentando mejorar algo, mi vida poco admirable y menos única, pero mía al fin, porque es la que más de cerca me toca vivir –al decir de Unamuno-  tomo las reflexiones del P. Jorge Loring, en “Para Salvarte”-, quien tuvo la paciencia de animarme. Esta es la reflexión: 

“Solo Dios es único Ser Necesario, que existe por sí mismo, que no depende de nada para existir. Existe siempre, sin principio ni fin…Las cosas que vemos en el mundo vienen unas de otras. Un hombre viene de otro hombre, una flor de otra flor… 

Cada ser existente de este mundo es como un anillo de una cadena. Cada anillo está colgado de otro anillo, que es quien lo sostiene. Si subimos por esa cadena de seres existentes llegaremos al primer anillo. ¿Quién sostiene el primer anillo? No puede ser otro anillo, porque no sería el primero…. 

Pero el primer anillo, ¿estará colgado en el aire? De ser así, toda la cadena caería en el fondo de la nada. Si la cadena de seres que existe no cae, es porque la sostiene alguien que está fuera de la cadena y no necesita de otro para existir. 

Ese Ser es Ñandejara. Que yo crea o no…nada importa, porque, “lo que ES y lo que no es, no ES.” 

Ese, que sostiene la cadena de seres existentes, que no necesita de otro, que existe por sí mismo, es Dios. Lo mismo que el Sol sostiene la vida en la Tierra. Sin el Sol, desaparece la luz y el calor. Sin la luz del Sol, la Tierra estaría a oscuras; y sin calor las aguas de los ríos y mares no se evaporan. 

Luego, no habrá nubes ni lluvias. Fuentes, ríos y mar se secarían. Las plantas morirían por sin agua, y los animales morirían de frío. El aire se envenenaría, porque no habría plantas para reponer el oxígeno. 

Es decir, que el Sol con su presencia, hace posible la vida en la Tierra. Lo mismo ocurre con Dios. Él sostiene toda la cadena de seres vivientes. 

Si veo una chaqueta colgada en la pared, dice Sheed, aunque no vea el clavo que la sostiene, sé que la chaqueta no desafía las leyes de la gravedad. Sé que un clavo la sostiene. 

Si en un paso a nivel desde tu coche ves un largo tren que un vagón tira de otro, comprendes que una locomotora estira de todos los vagones. Aunque no la veas. 

Lo mismo que un primer Ser eterno, al ver que unos seres hacen a otros, todos necesitan de otro para existir; menos el primero. Dios es ese Primer Ser que no necesita de otro para existir, que existe por sí mismo, siempre existió y nunca dejará de existir… ¡Cómo pio lo que no entendés loo Goyin! 

El cosmos no es eterno, fue creado por Dios. Dice Pablo  (Col,1:16sg) que Dios es “el Creador de todas las cosas. Él existe antes que todas las cosas”. El ateísmo marxista se basa en la eternidad de la materia, que existe desde toda la eternidad, no depende de Dios-Creador. 

Pero la “eternidad de la materia” es afirmación, no demostración. Físicamente es inverificable y filosóficamente es inaceptable. La imponen, sin más, como un postulado.

Marx era rabiosamente ateo, no por convicciones racionales, sino por motivos emocionales y psicológicos... El psicólogo no tiene más remedio que reconocer en Marx un odio personal hacia el cristianismo, casi idéntico al que sentía Freud... 

Tanto Marx como Freud -ambos judíos rechazaban el cristianismo en nombre de la Ciencia; por cuestiones emotivas”. 

“Como consecuencia de los nuevos descubrimientos científicos, el principio de la eternidad de la materia, resultó ser totalmente falso según reconocen, con rara unanimidad, los propios hombres de ciencia, quienes afirman que la materia comenzó en un momento determinado, hace algunos miles de millones de años. 

“Si el cosmos comenzó, necesitó de un Ser distinto del cosmos que lo puso en a existir. De la nada, nada sale. Este Ser Creador del cosmos, es Dios. Por eso el materialismo marxista es Imposible”. ¡Cómo pio lo que no entendés loo Goyín!

Loring dice:  Oí decir en una conferencia a Angel González Alvarez, Rector de la Universidad Complutense de Madrid, Catedrático de Metafísica y Miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas: 

“El ateo afirma que Dios no existe, pero no puede demostrarlo. El ateísmo es una profesión de fe en la NO existencia de Dios”. “El ateísmo no se prueba científicamente. Por eso, más que de ateísmo científico, hay que hablar de ateísmo literario”. 

Nietzsche y Sartre, al hablar de la “muerte de Dios”, no tienen argumentos para demostrar la NO existencia de Dios. Pero desean que Dios no exista, porque “si Dios no existe, todo está Permitido”. 

Hay realidades que escapan al conocimiento experimental. El razonamiento filosófico no es científico. Cuando Renato Descartes dice: "Pienso, luego existo", hace un razonamiento válido; y, sin embargo, no es científico, sino filosófico

El pensamiento no se ve, pero existe. La Ciencia no lo explica todo. “Los valores de bondad, belleza, santidad, heroísmo, lealtad, verdad; y los sentimientos de alegría, temor, esperanza, amor".... caen fuera del ámbito de la Ciencia.

Hay cosas inalcanzables para la ciencia experimental. La ciencia no sirve para demostrar la existencia de Dios, como tampoco sirve para demostrar el amor de una madre o la fidelidad de un esposo, aunque todo esto sea una realidad. 

Pero, no hay duda de que la ciencia aporta datos válidos que confirman la existencia de Dios.

La ciencia explica “cómo” funciona la naturaleza, no el “por qué”. Esto es objeto de la filosofía. Las razones para creer son suficientes, pero no evidentes como una verdad; Dios pide que el hombre le acepte libremente, no a la fuerza. 

Las verdades de la fe son razonables y ciertas. Podemos creer con firmeza, pero no se nos imponen con una evidencia aplastante.

Hoy, está de moda el agnosticismo (doctrina que niega al entendimiento humano la capacidad de comprender lo absoluto y sobrenatural); se ningunea a Dios. Cada quien es dios. El terrícola se instala en el mundo como si nunca morirá. El cómodo “no sabe, no responde” vale cuando se ignora.  

Pero cuando se trata de rechazar las razones por prejuicios personales, esto no es razonable. 

Lo primero que hay que decir: que negar a Dios, es mal negocio… se enterará cuanto muera. Las cosas son como Dios dijo que son, no como me parece. Dios dijo que seguiremos vivos más allá de la muerte, esto es así aunque haya quien lo niegue.

Algunos piensan que por no creer en el infierno son más libres. Es imprudencia. Cerrar los ojos ante la verdad no enriquece al hombre, lo empobrece. La prudencia no está en ignorar un riesgo, sino en prevenirlo. Cerrar los ojos ante un riesgo es señal de inconsciencia.

El agnosticismo es un riesgo. Cuando se trata de un riesgo grave como el morir electrocutado o la condenación eterna, hay que ser muy prudentes. Nadie toca un cable de alta tensión aunque tenga el 90% de probabilidades de que no pasará nada.

Pero Dios respeta nuestra libertad, incluso, la libertad de levantar nuestra mano contra su rostro. Y recuerden...a pesar de las diferencias, Dios manda que nos amemos unos a otros, porque somos todos hermanos. ¡Quien no tiene cuaresma...no tiene Pascua!, decía aquel adagio. 

¡Gracias P. Jorge... por tus sabias enseñanzas!

viernes, 26 de febrero de 2021

NO SOMOS RESPONSABLES...

 ¡De las conductas ajenas!

 
En este mundo “feliz”…para muchos y “desquiciado” para quienes se dicen “cuerdos”,  hay gente responsable, como también, harto irresponsable. 

Una expresión dice: “Responsabilidad es la virtud habitual de asumir las consecuencias de las propias acciones, respondiendo de ellas ante alguien”. 

Verdad es que todo lo que hacemos afecta a terceros, en algún grado. Si un “mono con pantalones” -con las debidas disculpas al primo gorila- quema basura en un patio baldío, provoca incendio y contamina el aire… es responsable de tal delito. 

Además, es responsable el político mbareté-pokaré, que promete progreso y democracia, cuando...cada vez más nos hunde en la desgracia. Lo mismo ocurre cuando el “borracho”, al mando del volante, mata.

No somos responsables por lo que otros piensan o hacen por cuenta propia, asumiendo riesgos; sus problemas; palabras, acciones, conductas... así sean nuestros hijos, si son mayores de edad. 

No significa que no hemos de solidarizarnos, sentir y sufrir con ellos las consecuencias. Claro está que ayudaremos, haciendo todo por llegar a un final mejor. Nos solidarizamos con su desgracia. Pero, no cargamos con la culpa. 

No somos responsables de las malas acciones: asesinato, robo, delincuencia…etc. propias de gente tóxica y despreciable. En todo caso, soportamos las maledicencias que la sociedad, nos endosen. Pero, responsables…no somos. 

Decía aquel profesor: La palabra responsabilidad de raíz latina “responsum”, significa “habilidad para responder”. Luego, al hablar de responsabilidad para con otros, no es sino, la capacidad de responder. 

Responder ante lo que se presenta, lo que necesitamos hacer o completar, y todo aquello en lo que estamos directamente involucrados. 

El ser responsable tiene dos beneficios: 1º. Hace más honestos, genera confianza y credibilidad; 2º. Hace más independiente, porque se asumen las consecuencias de los actos, orientando a mejores decisiones y libertad individual. 

El Catecismo de la Iglesia Católica dice: Cuando llegan a la edad correspondiente, los hijos tienen el deber y el derecho de elegir su profesión y su estado de vida. Estas obligaciones serán asumidas en una relación de confianza con sus padres, cuyo parecer y consejo pedirán y recibirán dócilmente… 

Los padres no presionarán a sus hijos ni en la elección de una profesión ni en la de su futuro cónyuge. Esta indispensable prudencia no impide, sino al contrario, ayudar a los hijos con consejos juiciosos, particularmente cuando éstos se proponen fundar un hogar. 

Los 10 mandamientos de los padres: 1. Formarás una familia funcional. 2. Amarás a tus hijos. 3. Serás un modelo de piedad. 4. Instruirás a tus hijos. 5. Dedicarás tiempo para estar con tus hijos. 

6. Disciplinarás a tus hijos. 7. Animarás a tus hijos. 8. Proveerás estabilidad y seguridad para tus hijos. 9. Conversarás sobre la sexualidad con tus hijos. 10. No serás un padre pasivo. 

Así las cosas, no nos “sintamos reflejados” en la actitud del fariseo. “Cuántas veces le pasamos a Dios factura por el “bien” que hicimos. Que Dios tendría que pagarnos los servicios prestados, cumplimos sus mandamientos, nos portamos bien con Él”. 

“Creemos que el otro no se merece tanto bien en la vida. Miramos de reojo al que tiene un traspié, nos consideramos mejores que él. Nos creemos buenos. Esa oración no sirve más que para aumentar nuestro ego”. 

Por eso, oigamos a Jesús: “algunos que, teniéndose por justos, se sentían seguros de sí mismos y despreciaban a los demás”. (Lc 18,9-14)  

“La gran dignidad humana se funda en lo que Dios hizo por nosotros. Siendo injustos y pecadores, tuvo compasión de nosotros y nos hizo hijos suyo. 

No saber esto, lleva al humano a apoyarse en sí mismo. La autoafirmación de sí mismo es orgullo y una señal manifiesta de debilidad; o incluso lleva a apoyarse en el aplauso de los demás, que pasa como un ruido vacío”, afirmó aquel Obispo. 

¡Señor, guárdame de ser juez de los demás!... ¡Aquel que esté libre de pecados, arroje la primera piedra!  (Jn 8, 1-7) 

jueves, 25 de febrero de 2021

¡9º MANDAMIENTO! (Éxodo 20:16; Dt 5:20)

 “No digas mentiras contra tu prójimo”

Perdonar es un gesto de gran confianza en Dios y de amor al prójimo”, dice María Paola Daud (Periodista de arte, cultura y estilo de vida: es.aleteia.org) 

Pon a un malvado sobre él, y Satanás esté a su diestra”. (Sal 109:6)​ “Luego el Señor me mostró en una visión a Josué… “Al lado derecho de Josué estaba el ángel acusador, que se disponía a acusarlo” (Zac. 3:1)​ 

«De la envidia nacen el odio, la maledicencia, la calumnia, la alegría causada por el mal del prójimo y la tristeza causada por su prosperidad». Y tiene razón, pues en la raíz de toda calumnia está básicamente la envidia. (Gregorio Magno-540-604). 

¿Cómo reaccionamos ante graves e infundadas acusaciones? Con ira, enojo, rabia, furia. 

La calumnia se combate con la verdad. El calumniador está obligado a reparar el mal causado en todo lo que pueda, a reparar en público el daño que haya podido ocasionar con sus mentiras y sus insinuaciones maliciosas. 

Hartos son los casos de difamación, calumnias, injurias…que se ventilan en tribunales aquí y allá, por izquierda y por derecha…al decir de aquel profesor. Se puede obtener algún dinero para “salvar el honor”, pero casi nunca, la paz entre ofensor y ofendido. 

Un relato Indio reza: “Un hombre envidioso, calumnió gravemente a su exitoso amigo. Arrepentido después, del mal que provocó, visitó a un hombre muy sabio a quien le dijo: “Quiero arreglar todo el mal que hice a mi amigo. ¿Qué hago?”. 

-El sabio: “Toma un saco lleno de plumas y suelta una a una donde vayas”. 

El hombre muy contento por aquello tan fácil, tomó el saco lleno de plumas y durante un día, las había soltado por toda la ciudad. Volvió donde el sabio y dijo: “Ya terminé”. 

El sabio contestó: “Esa es la parte más fácil. Ahora debes volver a llenar el saco con las mismas plumas que soltaste. Sal a la calle y búscalas”. 

El hombre se entristeció, pues sabía que no pudo juntar casi ninguna. -El sabio dijo: Así como no pudiste juntar de nuevo las plumas que volaron con el viento, así mismo el mal que hiciste y todas las calumnias que inventaste, volaron de boca en boca y ya no lo puedes reparar. 

Anda y pide perdón a tu amigo, y recuerda que, es mejor no desparramar las plumas, porque ya nunca podrás volver a juntar…”   ¿Qué hacer?. 

*Tómalo de quien viene. Quien calumnia no sabe qué es amar, luego, “tómalo de quien viene”. Continúa tu vida y muestra qué tan confiable eres en realidad. Se daña a sí mismo quien acusa en falso, porque, nadie le creerá nunca más. 

*Sé misericordioso. La víctima de difamación también debe ser misericordioso. Cuesta amar al miserable que con sus bajezas, ensucia el honor ajeno, pero hay que pagar mal con bien y recordar sobre todas las cosas que así somos agradables a los ojos de Dios: 

Bienaventurados cuando los injurien, persigan y digan con mentira toda clase de mal contra ustedes por mi causa. Alégrense, vuestra recompensa será grande en los cielos; de la misma manera persiguieron a los profetas anteriores a ustedes” (Mt 5,11-12). 

*Recuerda que no eres el único calumniado alguna vez. Una señora muy triste buscó consuelo en la confesión y un sacerdote anciano le respondió: “Veo que mucho te hirieron, por años. Estás cansada... No sientas odio ni rencor, pues Dios será quien la juzgue. 

Tú no eres juez de nadie; eres solo una hija de Dios muy amada, como todos nosotros, a pesar de nuestros terribles pecados. No olvides; Jesús fue crucificado. Y recuerda hemos venidos a “ser un signo de contradicción” (Lc 2, 34). 

¡Al pie de tu cruz....vaya mi lengua Señor!

viernes, 19 de febrero de 2021

¡DESCONSIDERACIÓN!...

¿Pecado de “Ñembotavy”?

El diccionario define “desconsideración”: Falta de consideración o respeto hacia una persona o una cosa. "Se puso a observarla con manifiesta desconsideración". (Rechazar una posibilidad de ayudar)  

¿Cuántas veces vimos a alguien con cierta discapacidad, necesitada de una ayuda- como cruzar la calle, inclinarse para recoger algo, empujar su vehículo- y simplemente, lo ignoramos (ñembotavy) cuando…no nos burlamos mba é 

¿Es exagerado decir que una “desconsideración-í”, es pecado loo, habiendo aterradores infortunios; crímenes, pobreza extrema, tráfico de drogas, prostitución infantil, aborto, corrupción galopante…entre otros grandes sacrilegios vividos hoy?  

Afirma José Rafael Sáez: ", lo son, son hijos de otros pecados, mejor aún, de otro pecado: qué entiendo por “desconsideración”. Es sinónimo de egoísmo barato, pobre de grandeza, simple y fatal... 

De tanto mirarse el ombligo, el hombre se creó una deformidad moral cada vez más abultada, desde el cual -el prójimo- es totalmente ignorado-descartado". 

Es el pecado de Caín, pero no el de haber matado a Abel, sino aquel terrible desprecio que expresa el asesino, cuando responde a Dios con desdén: “¿Acaso soy yo el guardián de mi hermano?” (Gen.4, 9) 

Luego, la persona desconsiderada dice algo así como: “Me importa un “pito” dónde está, cómo está o qué le pasa al otro”. No es mi problema, no le conozco ¿Quién se ocupa de mí?... No me rompan los “kinotos” con problemas ajenos. Ya tengo bastante con los míos”.  

Desconsideración es destruir la empatía de alegrarse o padecer con el otro, es derribar la solidaridad, es rematar lo poco que queda de amor, en este mundo que mató al Amor... 

Esto se nota en aquel que secuestra a un niño para venderlo, como en aquel que usa materiales baratos para construir un puente, inflando el presupuesto; en el que rompe una botella de cerveza y deja los vidrios esparcidos por la vereda, en la playa, en la calle...¡qué pio tanto...no es nió algo grave 

Desconsideración es estacionar sobre la vereda, estorbando al peatón; molestar con polución sonora, derrochar cientos de litros de agua limpiando la vereda; atropellar derechos de otros... 

En fin, culpable es el “profesional” que nunca llega a hora al consultorio, oficina o cita, porque nada le importa sus pacientes o clientes. Sufren “síndrome de diocesillo”…de casta superior ante quienes los “otros” deben postrarse. Y la lista de desconsideración puede seguir...

Esta conducta que parece ser sólo falta de educación, no lo es en absoluto. Sí, es total falta de respeto al otro. El desconsiderado sólo vive para sí, el otro no vale, no existe. Luego, la desconsideración es pecado grave. Si se trata de hijos (todos somos)...tanto peor. 

Cuaresma es tiempo de conversión y penitencia. En estas fechas los fieles guardan ayuno. Imitan a Jesús estando en el desierto, antes de su vida pública. Podríamos abstenernos, ayunar y purificarnos de tantas lacras...¡si queremos! ... dígase de paso.

Recordemos aquel dicho: ¡Quien no tiene cuaresma, no tiene Pascua! 

jueves, 18 de febrero de 2021

MÁXIMO CATALDI GODOY - (18.11.1931-18.02.2021)

Breves palabras de despedida...

Máximo Cataldi Godoy, papá de doce hijos, que pesar de sus humanas debilidades, fue un hombre sencillo, servicial, humilde, firme, flexible e íntegro. Muy preocupado por la educación paraguaya. En 1958 arribó a Puerto Presidente Franco, con la empresa “La Ovetense”. 

Y en 1965, tuvo la iniciativa de crear el servicio de transporte público con la famosa kombi VW, origen de la poderosa Empresa Transparanaénse S.A., según plaqueta recordatoria recibida del señor Milner Lucio Avalos. 

Su amabilidad rompía los hielos más duros. Como para Máximo, lo principal siempre era colaborar, se ocupaba por ayudar a las personas, en las que causaba fuertes lazos de amistad y compromiso solidario. Quizá, porque la gente fue solidaria con él. 

Cuando nos dejó hoy, tarde-noche, recibí llamadas de personas manifestando haber recibido su consejo y ayuda (que yo ignoraba). Natural de Espinillo, Coronel Oviedo, tuvo como ciudad de sus amores, Ciudad Pdte. Franco, donde trabajó 63 años de su vida. 

Pero hay una faceta que es la que se me hace más patente cuando, no pocas veces, me compartía sus escritos, poemas o canciones sobre el Salto Monday, o algunas líneas para sus libros sobre Ciudad Pdte. Franco. 

Hoy, sólo quiero recordarlo, en nombre de todos quienes lo conocieron. Gracias Máximo, por tu amistad, por tu cariñosa compañía, por inculcarnos a ser mejores personas. Gracias por tu fe, trabajo y honestidad reconocida, por tus poemas y canciones para tu querido paraje franqueño. 

Por tu talento y dedicación - Práxedes Fariña el 25 de abril de 2003

Mansedumbre de vocación

Alma bendecida

Xingú río de la música

Impoluto de amor

Maestro de talento

Obediente de la ley.

 

Casto virtuoso

Amparo de los sin voz

Titán de fe viva

Abierto generoso

Laudable ejemplar

Decente buen amigo


Infinito de amor.

 Generoso hospitalario

Ordenado escritor

Dedicado a la música

Obsecuente campeón

Ya te llena de canción.

Gracias papá, por dejarnos recuerdos tan aseados, por tu risa fácil e inteligente, por tus chistes, por tus libros y tu testimonio de vida ha Kuimba'e rekó. En nombre de tus hijos…¡Hasta siempre campeón!

domingo, 14 de febrero de 2021

¡PANDEMIA...! ¿Decretado o permitido por Dios?

 
Quienes saben o creen saberlo dicen que todo lo que acontece, así sea triste, tiene su lado positivo. Es cuestión de buscarlo…quizá se deba a aquella sentencia que dice: “no existe el mal absoluto”. 

El periodista científico de Seattle y doctor en Medicina, Bryn Nelson, aborda en clave irónica las valiosas lecciones que la pandemia proporcionó a la salud pública, al menos a la de los Estados Unidos.

Investigadores y médicos notaron algunos puntos positivos, curiosos, inesperados, en la conducta humana durante la Covid-19: el cielo es más azul, mermaron algunas enfermedades infecciosas; menos accidentes de tráfico, baja criminalidad… 

¿Cuáles serían otros puntos positivos? Una pediatra de San Diego señaló el brusco y radical descenso de ingresos por males respiratorios como gripe, influenza, VRS…, debido a la adquisición de hábitos saludables de lavado de manos e higiene personal. 

Aunque aumentó la violencia doméstica y la economía cayó, los crímenes, robos callejeros y el tráfico, bajaron. La NASA documentó reducción de la polución del aire hasta en un 20%-30% en las grandes ciudades del mundo. 

Una dermatóloga (Hospital de Lisboa) dijo esperar reducción de varios males durante el periodo de confinamiento. Y Bryn Nelson, concluye: “la gente está más concienciada de que nada importa, cuando se pierde la salud. Esto lleva a tener hábitos más saludables”. 

La pandemia es una crisis. De la crisis se sale mejores o peores. Nosotros elegimos. La solidaridad es una razón para ser mejores, no con cambio superficial, con una fina capa de pintura. No. ¡Mejores!”, dijo el papa Francisco. 

La palabra solidaridad está algo desgastada. A veces se la interpreta mal, pero es más que generosos actos esporádicos. Supone una nueva mentalidad que piense en la comunidad, priorizar la vida de todos sobre la apropiación de los bienes por parte de algunos. 

Luego, Dios no nos mandó la pandemia. Pero, ciertamente, lo permitió. ¿Para qué? Podríamos deducir dos porqués: 

. Para cambiar nuestro modo de pensar, hablar y actuar y así, mutar nuestra modo de vida. Pondré en ustedes un corazón nuevo y un espíritu nuevo. Quitaré de ustedes ese corazón duro como la piedra y les pondré un corazón dócil” (Ezequiel 36, 26)

Es decir, “cambiar el corazón, no pecar más…cambiar la pertenencia: no pertenecer a la mundanidad, al espíritu del mundo, a las estupideces del mundo, solo al Señor”.

. Para que las familias, no solo se reúnan, sino se unan. Porque se puede estar reunidos sin estar unidos, y hablar sin escucharnos. 

Conocemos la frase ¡todos para uno y uno para todos!, juramento de auxilio mutuo. Su fama internacional se debe a la famosa novela de Alejandro Dumas padre, donde los Tres Mosqueteros, Athos, Portos y Aramis juran lealtad al joven D`Artagnan. 

Solidaridad no es sólo atender penurias materiales, es también, compartir situaciones de los demás, ser consciente de cuanto ocurre a los hermanos, en realizar un auxilio eficaz.

Dios bendice al que es generoso y al que comparte su pan con los pobres (Prov.22:9)

sábado, 13 de febrero de 2021

EULALIA, ¡Niña mártir, modelo de cristianos!

 
 Sean Santos como mi Padre es Santo” (Mt.5:48) La Iglesia celebra a todas aquellas personas que pasaron su vida haciendo el bien y que no están en los altares de los templos. 

Eulalia es una mártir nacida en Mérida (España) a finales del siglo III, que murió con tan solo 12 años, por defender su fe cristiana. 

Un decreto emitido por el emperador Diocleciano prohibía a los cristianos dar culto a Jesucristo y les exigía adorar ídolos paganos. Eulalia, fue víctima de aquel decreto y de la maldad de quienes a través del miedo querían la desaparición del cristianismo. 

Ellos, lejos de amedrentarse, se mantuvieron en la mayoría de los casos fieles al Señor. A muchos, como sabemos, esa fidelidad les costó la vida incluso siendo niños, como es el caso de Eulalia. 

El Martirologio romano dice de la joven mártir: "el 12 de febrero, se conmemora a Eulalia, mártir de España, muerta por proclamar su fe en Jesucristo". 

Los datos acerca de su vida y de su muerte se encuentran en un himno hecho en su honor por el poeta Prudencio, en el siglo IV. 

En este poema se narra cómo Eulalia decidió protestar ante el gobernador Daciano por las leyes que prohibían el cristianismo. 

Se cuentan los terribles métodos de tortura contra ella. Eulalia fue hecha prisionera, encadenada, y torturada con unos garfios que le rasgaron la piel. Pero, con paz y aplomo, proclamaba a Cristo así: 

"Señor Jesús, aquí escriben tu nombre sobre mi cuerpo ¡Cuán agradable es leer estas letras que sellan, oh Cristo, tus victorias! La misma púrpura de mi sangre exprimida habla de tu santo nombre”. 

Por último, la quemaron con hachas encendidas. La tradición señala que sus verdugos vieron salir por su boca una blanquísima paloma que volaba hacia el cielo. 

Santa Eulalia es una de las santas más queridas y famosas de España. Ella representa el coraje y el valor del pueblo español, en especial de los niños. 

Hoy, además de la devoción con la que se le recuerda en su nación, la memoria pública le concedió un lugar especial: la Santa ostenta el título de alcaldesa perpetua de Mérida y es patrona de dicha ciudad. 

Todos podemos y debemos ser santos. Porque la santidad no es un privilegio de unos pocos, sino un deber de todos. Y, si Dios quiere que seamos santo, ¿por qué no lo o somos? 

¡Porque es muy difícil! Ciertamente, lo es. Pero, no es imposible, según miles de testimonios como la de Eulalia. Solo con desear cumplir la voluntad, podemos lograrlo. 

Dice Jesús: “Sin Mí nada pueden hacer” (Jn 15,5), pero “todo es posible al que cree” (Mc 9,23). Por eso, Pablo afirma: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” (Fil 4,13). 

El primer paso para ser santo es querer. Si no quiero, porque es nomás luego, difícil, porque no  quiero sufrir demasiado y prefiero mi vida cómoda y sin problemas... entonces, asumo que estoy perdido…por ni siquiera intentarlo.

Teresa de Jesús dice: hay que tener una "determinada determinación", una decisión sería querer ser santos. Obviamente, con voluntad débil, no seré alguien y menos, santo, mientras no tenga fuerza de voluntad necesaria para hacer grandes cosas. 

Por eso, humildemente digo con Pablo: “Sosténme en tus manos, tómame como el barro y hazme de nuevo. Transforma mi mente, mi alma mi cuerpo, Sométeme a cumplir tu voluntad, la cual es buena, agradable y perfecta”. ¡AMÉN!

viernes, 12 de febrero de 2021

¿ESTAMOS PREPARADOS?..

         PARA MORIR…

Dice el profesor Philippe Ariès: “Nos desacostumbramos a la muerte. Tanto, individuos, como las sociedades actuales, parecen desconocer. 

No digo que antes la muerte era salvaje. Al contrario, digo que hoy se volvió salvaje. Morir es desgracia. En cambio, el hombre de la Edad Media, era consciente de que era “un muerto en suspenso”… 

Que el plazo es corto, que el morir, siempre presente en el interior de sí mismo, rompía ambiciones y envenenaba placeres. El hombre tenía una pasión por la vida que hoy nos cuesta trabajo comprender, acaso porque la nuestra, se volvió más larga”. 

Alguien dijo: somos cadáveres ambulantes, muertos vivientes o vivientes para morir. Luego, morir, es inevitable. Pero, aceptar la muerte no supone planear nuestra destrucción. Eso sería suicidio, es decir, un insano deseo de morir. 

El Papa Francisco recordó que Jesús salvó a la humanidad de la muerte. Animó a no tener miedo, porque Jesús nos tomará de la mano, del mismo modo que tomó a la hija de Jairo, y nos dirá: ¡Levántate! 

Otras culturas, antes de la nuestra, tuvieron la valentía de encarar a la muerte. Era un caso  narrado por los viejos a los jóvenes. Una realidad ineludible… «Enséñanos a calcular nuestros años, para que nuestro corazón alcance la sabiduría» (Salmo 90:12). 

Contar los propios días como el corazón se hace sabio. Palabras que nos conducen a un sano realismo, expulsando el delirio de omnipotencia. ¿Qué cosa somos nosotros? Somos «casi nada», dice otro salmo (88,48); nadie puede vivir y no morir nunca. 

Si viviéramos incluso cien años, al final nos parecerá que todo haya sido un soplo. Tantas veces yo he escuchado a los ancianos decir: “La vida se me ha pasado como un soplo”.

Así la muerte pone al desnudo nuestra vida. 

Nos hace descubrir que el orgullo, ira, odio, eran pura vanidad: Con pena, nos damos cuenta que no amamos, ni buscamos lo valioso. Vemos, sí, lo bueno que sembramos: las amistades por las cuales hicimos lo que debíamos, y que ahora nos pasan la mano. 

Jesús nos autoriza a sentirnos dolidos cuando una persona querida se va. Él se conmovió «profundamente» ante la tumba de su amigo Lázaro, y «lloró» (Jn 11,35). En esta actitud, sentimos a Jesús cercano. 

En otro pasaje se lee que un padre tenía una hija muy enferma, y se dirige con fe a Jesús para que la salve (Mc 5,21-24.35-43). Figura conmovedora es de un papá o de mamá con un hijo enfermo. Y enseguida Jesús se dirige con aquel hombre, llamado Jairo. 

Alguien de la casa y dice: la niña está muerta. Jesús dice a Jairo: «No temas, basta que creas» (Mc 5,36). Jesús sabe que Jairo está desesperado. “¡No temas, sólo ten fe!”. “¡No tengas miedo. Ya en la casa, despierta a la niña y la devuelve viva a sus seres queridos. 

A Marta que llora por la muerte de su hermano Lázaro presenta la luz de un dogma: «Yo soy la Resurrección y la Vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá: y todo el que vive y cree en mí, no morirá jamás. ¿Crees esto?». (Jn 11,25-26). 

Es lo que Jesús repite a cada uno de nosotros, cada vez que la muerte viene a arrancar el tejido de la vida y de los afectos. Nuestra existencia se juega aquí, entre el lado de la fe y el precipicio del miedo. 

Dirá a cada uno de nosotros: “¡Levántate, resurge!”. Cada uno piense en su propia muerte, y se imagine ese momento que llegará, Jesús nos tomará de la mano y nos dirá: “Ven, ven conmigo, levántate”. 

Esta es nuestra esperanza ante la muerte. Para quién cree, es una puerta que se abre; para quién duda es una grieta de luz que filtra de una puerta que no se cierra del todo. Para nosotros, una gracia, luz que al encontrarnos con Jesús, nos iluminará. 

El escrito no pretende ser negativo...solo trata de ser ¡objetivo y veraz!

miércoles, 10 de febrero de 2021

¡ME HACE PERSONA!

¿Un título de grado, cosas o buena conducta?

Dice Alicia Escaño Hidalgo: “Cuando alguien se define, suele decir “yo soy…el dr, la prof, la lic, el ing…Pero esto no es verdad, nadie es nada en esencia, más que una persona. Quien se define de esta manera, olvida otros muchos aspectos de sí mismo”. 

¿Por qué exigen hacerse llamar por el título o cargo cuando no se trata de tarea o entorno laboral o profesional? ¿Para causar impresión, temor, respeto?. ¿Es que, se siente menos persona o considera “falta de respeto”, obviar su título o función? 

La inteligencia sin ética genera una fauna de grotescos desfilantes en las pasarelas de la “aparatosidad estúpidamente opulentas donde pavonean sus huecas vanidades”, diría José Ingenieros. 

En nuestra fauna, esto se ve como un “darse importancia”, al “estar por encima del otro. Es algo que califica como conducta vana y ridícula. De hecho, define al humano, la ética. 

Porque marca acciones entre el bien y el mal. Cultiva la honestidad, empatía, fidelidad a su palabra, etc. La persona ética, enfrenta dudas ante posturas que exigen valores éticos, para no dejarse arrastrar por la camandulería, el pokaré”. 

Una cualidad que defina a la persona ética es su integridad. Su firme conducta armoniza con su rectitud. Por eso es ejemplo de honradez en todo momento y lugar, cualidad que inspira confianza. 

Quien posee ética personal es coherente, sus valores no permiten transar con el error. Su palabra vale. Es cuidadoso, sabe que los mentirosos, difícilmente recuperan la confianza. La omisión y negligencia, son enemigas de la integridad. 

Es vital diferenciar lo correcto de lo erróneo, para no rivalizar con los valores y principios. Esto da buenos resultados…aunque seamos arriero perõ, sin título de Lic. Ing. Dr. etc. 

Quien cultiva ética personal, influye en la vida social, laboral, individual. Se erige en ejemplo para los demás…aunque sea un arriero Perõ, sin título o cargo.

Pero, si es la costumbre, ¿Cómo digo a alguien que no me llame Dr, Lic, Ing...sino por mi nombre??  ¡E á na che memby!…Y solo dile: ¡amigo, soy o me llamo Pedro, Luis, Juan, Matilde…y punto!

Porque, “ijargel con devoción” ningó decir, por ejemplo: “El Dr. Lacú, participa con hondo pesar el fallecimiento…”; “La Ing, Sinfó…le augura feliz año 2021”; “El Lic. Katupyrý… se complace en invitarle a una ronda de tragos”…¡Buena noticia!: Nadie murió al ser llamado por su nombre!

¿Supone carencia de autoestima, necesidad de éxito o idea de inferioridad, por lo que la persona requiere de sobremanera, ser reconocida o admirada? ¿Pecado de titulitis aguda?

Albert Ellis, padre de la terapia racional emotiva, planteó que los humanos no caigamos en la trampa de definirnos en función de cualidades superfluas o pasajeras, como ser el físico, la fama, el éxito, el dinero o el estatus. 

Muchos dicen que quienes exigen se les llame por su título o cargo, son gente maltrecha, que no logra nada relevante en su vida y lo único que tiene es un cargo o un título... No saben que…¡ser persona es don divino, un elogio, vale mucho! 

Se dijo: “Todo título como exigencia social, es solo un modo de dividir a la sociedad en clanes, y por principio de igualdad entre los hombres me opongo a ellos”. ¡Nadie es más por Tener...sino por SER?