¡TODOS NOS NECESITAMOS RECÍPROCAMENTE!
Un agricultor se relaciona con una
profesora porque sus hijos necesitan estudiar; se relaciona con el médico
porque, algunas veces, alguien en la familia se enferma; procura al comerciante
porque necesita hacer compras y vender sus productos; se relaciona con el Padre
o Pastor porque estos le enseñan a relacionarse con Dios y a creer en la luz
del Evangelio, que podría iluminar el nuevo mundo que sueña para sus hijos; se
relaciona con el panadero, con el farmacéutico, con el albañil... y con mucha
otra gente.