sábado, 14 de febrero de 2015

JARÉ = CHIKUNGUNYA Y DENGUE CAUSAN:

¡ENFERMEDAD, DOLOR, GASTO Y MUERTE!

El Ministerio de Salud Pública declaró un brote epidémico de dengue en Asunción y el departamento Central, ante la multiplicación de casos registrados y los alarmantes niveles de infestación larvaria que se verificaron en algunos barrios y ciudades. Las notificaciones de casos de la enfermedad proceden especialmente de Tablada.

Esta enfermedad ya es endémica en nuestro país, es decir que está presente a lo largo del año y registra periódicamente brotes epidémicos, de mayor o menos extensión y gravedad. Es preciso recordar que este año ya se contabilizaron más de 30.000 casos de dengue, 67 de los cuales tuvieron derivación fatal.

Sin la activa participación de los vecinos no servirá de nada duplicar la cantidad de fumigaciones, movilizar a fiscales y policías o involucrar a las fuerzas armadas en las acciones contra la enfermedad. Las autoridades deben plantearse, además de las medidas puntuales para atenuar el impacto de estas plagas, en planes a largo plazo para dominar este grave problema de salud pública.

JARÉ ha ÑEMBOTAVÝ son causantes de plagas como el dengue y chikungunya,  entre otras, causen numerosas muertes. Se decretó la alerta sanitaria en nuestro país, para prevenir esta enfermedad contagiosa que se trasmite por la picadura del mosquito Aedes aegypti que también transmite el dengue.

PREVENIR EL CHIKUNGUNYA y DENGUE ESTÁ EN NUESTRAS MANOS, debemos mantener limpias nuestras casas, nuestras veredas y todo nuestro alrededor, destruir criaderos, limpiar techos, canaletas, botellas vacías, vasos y platos descartables, cigarrillo piré, no arrojar latita de cerveza vacía en medio de yuyales, etc, etc, etc. Es decir, hacer guerra al YARÉ, ha anivé ñande puerco. ¡JAIKUA PÁ VOI NIKO!

Trabajemos entonces, la comunidad toda, en la prevención de esta plaga que mata gente. Escuelas, centros deportivos, asociaciones culturales, religiosas, todos y cada uno de los vecinos que queremos vivir en un barrio limpio y saludable, y no tener que juntarnos para el velorio de algún vecino, que pasó al otro mundo, por haber sido víctima de nuestra puerca vecindad. DIGAMOS: ¡FUERA YARÉ, SEAMOS  LIMPIOS!

Demos a esa especie segunda piel paraguaya, esa apatía social (que se traduce como ñembotavy, mbéiko cheve, ñandé ko upeichante voí, e pena`ý hesé), una gran patada y asumamos un mayor compromiso ciudadano. Que las autoridades primero, cumplan y hagan cumplir las normas vigentes, con ejemplares sanciones punitivas contra los responsables de la suciedad en baldíos, gomerías, chatarrerías y de cualquiera que se convierte en asesino, por atentar contra la vida humana. 



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