CUARESMA 2015

¿QUÉ SIGNIFICA IMPOSICIÓN DE CENIZAS?

Los cristianos de confesión católica, hoy empezamos la Cuaresma, mediante la imposición de las cenizas, símbolo muy conocido para todos. Es el período de 40 días que precede a la Semana Santa.

Este día recibimos una cruz en la frente con las cenizas obtenidas al quemar las palmas usadas en el Domingo de Ramos el año anterior. Al imponer la ceniza, el sacerdote pronuncia las palabras "Recuerda, hombre, que eres polvo y al polvo volverás". Se trata de recordarnos que la vida es pasajera. Tiempo establecido para hacer una auditoría moral de "ñande recové, ja je py´á monguetá mí haguá, es decir, para apuntar hacia la purificación del espíritu.

Recuerda una antigua tradición del pueblo Hebreo, que cuando se sabían en pecado o cuando se querían preparar para una fiesta importante en la que debían estar purificados, se cubrían de cenizas y vestían con un saco de tela áspera. De esta forma nos reconocemos pequeños, pecadores y con necesidad de perdón de Dios, sabiendo que del polvo venimos y que al polvo volvemos. Así las cosas, las cenizas nos recuerdan:

- Nuestra naturaleza y origen: Dios formó al hombre con polvo de la tierra (Gen 2,7).
   "Todos expiran y al polvo retornan" (Sal 104,29)

-  La raíz de la palabra humildad es "humus" (tierra). La ceniza es signo de humildad,    

   para recordarnos lo que somos.      

  

- Las cenizas, como polvo, son un signo de la fragilidad, del pecado y de la mortalidad del  

   hombre, y al recibirlas se reconoce su limitación; riqueza, ciencia, gloria, poder,            títulos, dignidades… de nada nos sirven. 

  

Objetivo de este tiempo es: el que roba, no robe más, sino más bien que trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, a fin de que tenga qué compartir con el que tiene necesidad  (Ef. 4, 28)

El que mata, el haragán, el adúltero, el calumniador perjudica al prójimo…. El mbareté-po karé…. el sinvergüenza que no paga su cuenta, el kaú rapó… el que molesta al vecino, el ladrón de guante blanco, los que lucran con drogas y pornografía, etc,  se arrepientan y se conviertan. Es éste, el sentido real de la Cuaresma que comienza hoy.

La imposición de la ceniza no es un rito mágico, que nos quita nuestros pecados. Es un signo de arrepentimiento, de penitencia, pero sobre todo de conversión. Es el inicio del camino de la Cuaresma, para acompañar a Jesús desde su desierto hasta el día de su triunfo que es el Domingo de Resurrección.

Debe ser un tiempo de reflexión de nuestra vida, entender a dónde vamos, analizar cómo es nuestro comportamiento con nuestra familia, vecinos y en general, con todos los seres que nos rodean.

Las cenizas son un sacramental, no confieren la gracia del Espíritu Santo a la manera de los sacramentos, pero, por la oración de la Iglesia, los sacramentales «preparan a recibirla y disponen a cooperar con ella» Catecismo (1670 ss.)