martes, 16 de noviembre de 2021

¡LA VIDA! ¿Una porquería? ... ¡Sí y No!

 

Alguien dijo: Normalmente, opinar: “mi vida no tiene sentido” se debe a una decepción, a una enfermedad, a fracasos, a la muerte de un ser querido, a un desengaño o crisis que nos dejan vacíos… muy frustrados.

Creer que la vida no tiene sentido es uno de los motivos por los que el terrícola sufre más. Siente que vive a la deriva y cualquier “vientecito” le desestabiliza. Así puede llegar a decir:no quiero vivir”. 

Todos en algún momento de la vida, nos sentimos engañados, desilusionados o perdidos, para hacer lo que pensamos hacer y no hicimos. Y la vida no tiene sentido… ¿qué hacer? 

Entonces, nos dicen “tomá un sedante”, te hará bien. Pero el analgésico no es la solución. Muchas veces agrava el problema. Hay casos en que se pierde la confianza en uno mismo, al punto de no saber operar la propia vida. 

En esta crisis, aparece -entre otros- el alcohol, como auxilio-subsidio para calmar o escapar de la terrible situación. Pero, el alcohol es un factor de riesgo de conducta suicida. 

“El riesgo de suicidio debido al alcohol es 9 veces mayor respecto a la población general”, afirmó la Dra. Mercedes Navío. Asegura que la asociación entre dependencia de alcohol y suicidio se incrementa al aumentar la edad, entre los 20 y los 50 años. 

Ante tan asoladora vista, puede ayudar el “Decálogo de la Serenidad” de (Juan XXIII).

1. Sólo por hoy trataré de vivir exclusivamente al día, sin querer resolver los problemas de mi vida todos de una vez.

2. Sólo por hoy tendré el máximo cuidado de mi aspecto: cortés en mis maneras, no criticaré a nadie y no pretenderé criticar o disciplinar a nadie, sino a mí mismo.

3. Sólo por hoy seré feliz en la certeza de que he sido creado para la felicidad, no sólo en el otro mundo, sino en éste también.

4Sólo por hoy me adaptaré a las circunstancias, sin pretender que las circunstancias se adapten todas a mis deseos.

5. Sólo por hoy dedicaré diez minutos a una buena lectura; recordando que, como el alimento es necesario para la vida del cuerpo, así la buena lectura es necesaria para la vida del alma.

6. Sólo por hoy haré una buena acción y no lo diré a nadie.

7. Sólo por hoy haré por lo menos una cosa que no deseo hacer; y si me sintiera ofendido en mis sentimientos, procuraré que nadie se entere.

8. Sólo por hoy me haré un programa detallado. Quizá no lo cumpliré cabalmente, pero lo redactaré. Y me guardaré de dos calamidades: la prisa y la indecisión.

9. Sólo por hoy creeré -aunque las circunstancias demuestren lo contrario, que la buena Providencia de Dios se ocupa de mí, como si nadie más existiera en el mundo.

10.- Sólo por hoy no tendré temores. De manera particular no tendré miedo de gozar de lo que es bello y de creer en la bondad. ¡Que así sea!

No hay comentarios:

Publicar un comentario