TOMAR TU CRUZ CADA DÍA!

                                                  ¿QUÉ SIGNIFICA?

Dice el articulista: Tomar tu cruz cada día es condición de todo bautizado. Para poder ser discípulo de Cristo Jesús debemos “tomar nuestra cruz cada día”.“Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame” (Lc 9:23)

¿Cómo es eso de tomar nuestra cruz cada día?...Es que, pecamos con pensamientos, palabras, obras y omisiones.

Pensamientos: por ejemplo: pecado de pensamiento es la mala costumbre de juzgar al semejante. Peor, si el “motor” que me impulsa es…porque a “mí me parece”, “creo que”, “tiene toda la pìnta de…”

Cuando estos pensamientos me carcomen, tomar mi cruz es: pensar: “no soy juez de nadie…” y negarme a seguir pecando de pensamientos, he de tener presente que es una trampa de ´Satán´, el malevo.

¡Pero, puedo negar ese pensamiento y no dejarlo entrar a mi corazón! Con otras palabras; con un firme “no”, decido tomar mi cruz y matar mi mal deseo de pecar.

Palabras: Cuando llega la tentación de perjudicar al otro, con algún chisme “me dijeron que” mi cruz será poner freno a un calumnia. Cuesta “morderse la lengua” cuando ésta es venenosa y siniestra. Pero, con un firme “no”, decido tomar mi cruz y matar mi mal deseo de pecar.

Obras: No pocas veces podemos pecar muy “finamente” haciendo…a) un olvido voluntario al no devolver lo ajeno, es, sencillamente: robo. Se roba energía eléctrica (conexión clandestina); al cobrar caro por un trabajo mal hecho; por ser “letradito” le jodemos al otro.

Roban los profesores cuando llegan tarde y enseñan mal. Roban los médicos cuando yerran el diagnostican y te hacen gastar millones, cuando había sido que ja re úma hule kurí, y te tienen en terapia intensiva ¡porque es nuestro deber hacer todo lo que se pueda!

Se roba también cuando abogados te destrozan con faraónicos honorarios, porque ndajé la ley así lo estipula….y te dejan más pobre de Lázaro, mientras ellos se vuelven Epulones... Y por tantas maneras que diariamente profesionales de distintos pelajes cometen con expertéz.

Naturalmente, roban también las malas autoridades; ignorantes y parias ayer, hoy, aunque hiper millonarios…siguen ignorantes y matoniles…ejemplos dan los medios de información.

Omisiones: El mal del siglo XXI, además de las plagas conocidas o por conocer…radica en el buenismo, que en su expresión más desagradable significa tolerancia (mal entendida), que en la práctica es igual a inútil, cuando no cobarde...que no hace el mal; pero tampoco mueve un dedo por evitarlo.

Así, se comete todos los crímenes y atrocidades posibles frente al buenito mi, pero este, hesakuapé, i japysapé, no ve, ni dice, ni hace nada, oñembotavy... es delincuente por omisión.

Por ello, la política, es expresión de la caridad, cosa de los mejores; si la hacen los peores es porque los buenos no la hacen, de ahí que el peor de los políticos malos sea mejor que el más bueno de los abstencionistas…al decir del Dr. Carlos Díaz.

Luego, esta cruz metafórica causa dolor porque no es fácil remar contra-corriente. Pero san Pedro nos anima:

“Puesto que Cristo ha padecido por nosotros en la carne, ustedes  también ármense del mismo pensamiento; pues quien ha padecido en la carne, terminó con el pecado” (1 Pe. 4:1)

El tomar tu cruz cada día nos lleva a una transformación. Hoy podemos ser muy diferentes de lo que éramos. Conforme vamos limpiándonos de las lacras, los frutos del Espíritu se van manifestando.

Luego, en vez de ser rápidos para juzgar, criticar, robar, mentir, matar… podemos intentar ser menos malos cargando nuestra cruz cada día y decir con  san Pablo: 

“No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús”  (Fil. 3:12).

NOTA: ¡¡Se describe una realidad...no se juzga la conciencia de personas!!