Con la comercialización idiotizante del deporte, mediante los medios de comunicación, aparece un nuevo objeto de consumo pasivo: el fútbol. “Se acortan los horarios de clases, se paraliza la actividad laboral haciendo surgir la poderosísima industria del tiempo libre”.
Acordemos: el fútbol-deporte (no el fútbol-espectáculo), hace al desarrollo de un pueblo. Promociona la salud física y psíquica, inculca disciplina, esfuerzo y respeto. Favorece la inserción y la relación social de los miembros de la comunidad. Entonces, educa bien.
Pero, en el fútbol-espectáculo, no importa el deporte sino el dinero. Jugadores, técnicos y dirigentes, realizan trabajo competitivo y rentable, sometido a las más duras e inhumanas leyes del mercado: una empresa cuyo anhelo es el lucro desmedido que cosifica al hombre.
Olvidamos que la esencia del deporte es alegría. Una de los más graves males a las que ha sido catapultado: del homo ludens a homo videns: ¡Ganamos! grita el hincha luego 2 horas frente a la tele, bebiendo. ¿En qué contribuyó el apático televidente al triunfo del equipo?
En cancha, 22 homo ludens juegan; millones homo videns sólo miran. ¿Deporte de masas? Las masas no juegan. Quien juega con ellas son las empresas deportivas que les sacan plata, vía promoción de consumo de imágenes, camisetas, calzados, entradas a precio de oro, etc.
Idolatría. Por el espacio que ocupa en la prensa, parece ser lo más relevante que alimenta nuestra cultura. ¿Acaso no pelean, matan y mueren por su “majestad el fútbol”? ¿Cómo es que el hombre inteligente cayó tan bajo?
“El fútbol es popular porque la estupidez es popular” “El fútbol despierta las peores pasiones”, afirma el afamado escritor argentino, Jorge Luis Borges (1899-1986)
2) Comparto lo que me enviaron: “¿Por qué a la gente le gusta tanto Bad Bunny?... “sólo porque está de moda y este tipo de música es popular, aunque no tenga mucho “talento”. Elegido como mejor artista del Año en los premios Video Music Awards”, respondieron.
¿Por qué el éxito de sujetos como Bad Bunny? Una respuesta sería: Penosamente, creo que es exitoso por la incultura de la gente. Octavio Paz en su libro “Tiempo Nublado” refería: “América Latina es un pueblo en dramática involución cultural que no tiene remedio”.
Es como un aviso que un intelectual de ese calibre dijera:“A las élites económicas, les conviene que la gente se embrutezca y sea cada vez más estúpida e ignorante por incitar al consumo de droga, la promiscuidad sexual….y la vida irresponsable.
Es la promoción de una vida de fantasía fuera de la realidad…de algo que no es música, sino un disfraz…de un movimiento social que promueve las peores deformaciones de lo más bajo de la sociedad, aprovechándose de la ingenuidad e ignorancia de la juventud.
El lenguaje se destrozó por completo…quedó amorfo en las letras de estas basuras que usurpan el nombre de la canción y la degeneran y prostituyen.
La gente paga lo que sea porque…no van a escuchar música…van a recintos en donde quedan afónicos gritando, viendo a un estrafalario…lleno de luces, rodeado de bailarines de sexo indefinido haciendo loas de un producto tecnológico ficticio de la mercadotecnia.
No es arte, ni es baile, ni es danza, las letras solo son balbuceos incomprensibles, ni es canto, ni es música ni es nada. Es un espectáculo que empuja para que los jóvenes se embrutezcan…Ahí les venden drogas, alcohol, prostitución, fármacos, etc … negocio redondo.
Lo que promueven no es un cantante sino una figura, un símbolo de la decadencia, la derrota cultural, la destrucción de los valores y la familia, la desaparición del vínculo intergeneracional.
La ruptura entre padres e hijos, es el triunfo de bajeza, ignorancia y mediocridad. Son letras perversas que, si logras descifrar, son balbuceos soeces monótonos embrutecedores.
Es triste que los niños oigan esas expresiones desde la primaria y por imitación se promueva esa forma tan primitiva de ver la vida; no les dejan escoger, no hay ni siquiera opción a esta basura.
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