martes, 14 de agosto de 2012

LIDERAZGO EN CRISIS

¿POR QUÉ?
¿Quién no ha escuchado, repetido o estudiado sobre el término liderazgo, tan excelente y tan manoseado?. Quizá debamos empezar por comprender cabalmente el concepto del vocablo, pues para no pocos, líder es lo mismo que caudillo o jefe.

Hannah Arendt dijo: “La crisis de autoridad que vive el mundo contemporáneo no se debe a que quienes deberían obedecer se nieguen a hacerlo, sino a que quienes deberían mandar, eluden esa tarea”. Esta dificultad pasa por que hoy preferimos, en lo posible, no caer antipáticos, es decir, argel o kangueró.


Liderar significa también evaluar desempeños y aplicar sanciones. El riesgo de exponerse ante opiniones desfavorables, cuanto menos, es ya una muralla pocas veces franqueable. ¿Cuántos “líderes” votaron una moción, aun sabiendo contraria a sus convicciones, a favor de la eutanasia, el suicidio asistido o el aborto? ¿Cuántos “líderes” concejales municipales, departamentales o nacionales votan en contra de los intereses del pueblo a quién dicen servir?

Nuestra ajetreada y lamentable realidad política grita que muchos “líderes” no siempre han sido responsables de la toma de sus decisiones, luego, la plebe es la que debe arcar con todas la consecuencias.

Aceptar una posición de autoridad, política, administrativa, judicial, etc., supone constituirse en representante de la sociedad, es decir, ponerse al frente de un organismo y por lo tanto, ejecutar el cometido propio de un líder.

Paseando la imaginación por las figuras de “nuestros honorables” líderes, desde muy antes y ahora, nos parece que sólo algunas pueden dar testimonio del real significado de “liderazgo”, porque han sido ejemplos de servicio en el seno de sus comunidades.

Cuando hablamos de liderazgo, no nos referimos a lo que llamamos “gobierno”. En toda nación existe un poder político, una institución que organiza la multitud de personas en colectividad. El liderazgo se funda más en las personas que en las estructuras; no se rige tanto por la fuerza, las leyes, la represión, sino más bien por las capacidades o carismas personales de los líderes.

El termino liderazgo, han dicho, posee tres significados principales: Es un atributo derivado de una posición; La característica de una persona; Una categoría de conducta.
El LIDERAZGO no existe para que algunos se sientan superiores a los demás. Es un gran engaño creer que recibir o llegar a algún cargo o responsabilidad, signifique “ser superior” o “dueño de los demás”.

El superior o el que ejerce una autoridad, no crece por eso en dignidad humana, no es más persona que los otros, sino que asume una función de guía, un servicio de autoridad que, como dice la misma etimología latina: autoridad-augere - hacer crecer, está totalmente en servicio del grupo, para que éste, de la mejor manera y mas rápidamente, alcance su fin.

Dada la chatura cívica y moral de muchos representantes nuestros, es imposible desconocer del por qué, el liderazgo está en crisis. Así las cosas, debe ser eliminado el término “honorable” en algunas corporaciones públicas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario