Pero demasiado pronto, “redimidos” por el espectáculo…
La prensa nos “acogota” con noticias desalentadoras todos
los días, muchas veces al día: Inseguridad, latrocinio, salud y educación por
el suelo. Ello, da la sensación que nos hallamos en un estado de desesperanza e
inconfesables deseos de “reventar”, porque no “queda otra”…. reflexionó aquel
alumno de Teología al inicio de clases. Dos episodios:
1º) La educación básica está por el suelo: ...“A Nuevo
Renacer acuden 330 alumnos del preescolar al noveno grado y solo tienen cuatro
aulas. Dos grados por turno quedan sin sala y los alumnos estudian afuera o en
el angosto pasillo de la institución...
“La escuela Renacer, ubicada a tan solo cien metros de la
otra, soporta una realidad diferente: cuentan con tres salas nuevas, pero no
tiene sillas para los alumnos. Algunos llevan sillas y hasta mesas de sus casas
para estudia. (...) Diario ABC – 07.03.13.
2º) Elton John
inmortaliza una noche en Paraguay: “Pocas veces, a lo largo del tiempo, el
Paraguay ha recibido a figuras internacionales que marcaron verdaderas huellas
en el panorama mundial. Esta vez, el caso rige a rajatabla: una figura
histórica de la música británica actuaba por primera vez aquí. El año pasado
fue el multitudinario concierto de Paul McCartney, mientras que el pasado
miércoles siguió la racha el emblemático Elton John, en un show sin tanta gente
como el del ex Beatle, pero no menos histórico ni impresionante". (....)
Diario AC 07.03.13.
Hasta ayer - ante medios de comunicación - no pocos se
desgarraban las vestiduras, muy “indignados” ndajé, por la situación de miseria
y abandono del 70% de nuestros compatriotas. Hoy, los mismos y tantos más,
explotan declaraciones delirantes, como si fuera el mayor timbre de gloria para
nuestro quebrado país, el espectáculo del famoso artista aludido. (Dígase de
paso, soy un admirador del talento musical del Elton John).
Al punto, imagino a alguien protestando este artículo
con: ¿Y qué tiene que ver Elton John con la miseria del Paraguay?. Respondo:
Nada. Porque, el problema no es el artista, sino, nosotros. <No es el mal
que no hacemos, sino el bien que no hacemos>
El punto es, “la generalización de la frivolidad de un
mundo donde en primer lugar en la tabla de valores vigente lo ocupa el
entretenimiento, y donde divertirse es la pasión universal (...) humor y
diversión a unas vidas encuadradas, por lo general, en rutinas deprimentes y a
veces embrutecedoras (...) dice Mario Vargas Llosa en “La civilización del
Espectáculo” p.34.
Espectáculos como fútbol y bandas musicales (muchos
carentes de creatividad y buen gusto, pero compensan con ruidos), entre otros
programas de entretenimiento en la Tv, no están mal. Pero vivir y morir sólo
para la joda, ya es reprochable. Muchos de estos espectáculos han hecho
presente a los antiguos circos romanos, que sirven como desahogo de
frustraciones y miserias, despertando el instinto irracional. No se ignora
peleas entre barras bravas y otros escándalos luego de algún espectáculo
narcotizante. Muchos, demasiados, con derivación fatal.
Aunque algo romántico, pero necesario es pensar en
voltear la mirada hacia nuestra mísera realidad actual, e invertir algo de
tiempo y dinero en lo fundamental, para mayor beneficio a todos, sin renunciar,
naturalmente al merecido y necesario entretenimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario